Dos ciudadanos españoles están internados en el hospital militar de Bucarest tras resultar heridos en el incendio que se desató el pasado viernes por la anoche en una discoteca de la capital rumana, según informó ayer el Servicio Rumano de Inteligencia (SRI).

Ambos "se hallan fuera de peligro", aseguraron fuentes diplomáticas españolas en Bucarest tras confirmar la nacionalidad española de dos de los lesionados.

Las mismas fuentes precisaron que no pueden descartar que haya más víctimas españolas, ya que aún no se han identificado 17 cuerpos sin vida y otros cinco heridos.

"En la Unidad de Servicios de Urgencia han sido internadas siete personas, de las cuales cuatro están en estado grave y tres resultaron intoxicadas por el humo", indica el SRI en un comunicado. De esos siete heridos, "dos son de ciudadanía española y uno italiana", añade.

El SRI no ha revelado la identidad de las víctimas, ni ha precisado el estado de salud de los lesionados en este grave accidente, que ha causado 27 muertos y 184 heridos. El consejo de ministros de Rumanía se reunió en sesión extraordinaria y ha decretado tres días de luto.

Aunque las autoridades todavía no se han pronunciado sobre las posibles causas del desastre, un testigo relató al canal de noticias Digi24 que las llamas fueron provocadas por fuegos artificiales que incendiaron un pilar del interior del local.

En ese momento tocaba en directo el grupo Goodbye Gravity. Uno de los dos heridos españoles se llama Etzarri Glarzi, de 22 años, y el otro no ha sido identificado. Al concierto asistieron 500 personas. Hay cuatro víctimas en estado grave y siete han sido operadas por la gravedad de las quemaduras.