La madre del bebé de 13 meses fallecido el lunes en Seseña (Toledo), que fue hallada por su pareja en estado de inconsciencia encima del menor, ingresó en la Unidad de Psiquiatría del Hospital Provincial de Toledo. El cuerpo del menor no presentaba aparentes signos de violencia, por lo que, a falta de los resultados de la autopsia que le realizaron ayer, se sospecha que haya muerto por asfixia o aplastamiento. La mujer, de 37 años, llegó al Hospital Virgen de la Salud de Toledo, después haber ingerido una cantidad importante de medicamentos y ser hallada desmayada por su marido, que declaró que tiene antecedentes psiquiátricos. La Delegación del Gobierno confirmó ayer que no había ninguna persona detenida en relación con este suceso.