El juez que investiga la violación en grupo en los pasados Sanfermines de una joven madrileña imputó a cuatro de los cinco procesados por un abuso sexual el pasado mayo de otra chica de 21 años de edad en una localidad de Córdoba.

Los investigados grabaron los hechos de la ciudad andaluza en un móvil y compartieron un vídeo en un chat, según señala el auto, que puede ser recurrido, en el que el magistrado sostiene además que "existen serios indicios de que podrían haberse utilizado sustancias específicas destinadas para provocar la inconsciencia de la víctima".

En la instrucción judicial sobre la violación ocurrida en Pamplona el pasado 7 de julio, el magistrado investiga también unas grabaciones realizadas supuestamente por los acusados, entre ellos un militar y un guardia civil, y alude, como en este nuevo caso, a una sustancia sedante, conocida como burundanga. El juez considera que "resulta indiciariamente acreditado" que A. J. C. E. ofreció a la denunciante acompañarla a su domicilio en un vehículo, donde nada más entrar y tras sentarse en el asiento del copiloto cayó "en un estado de profunda inconsciencia".