Un empresario de Teruel fue detenido por agentes de la Policía Nacional acusado de un presunto delito contra el derecho de los trabajadores, a los que hacía trabajar en una explotación agraria de lunes a domingo hasta 80 horas semanales. La detención se produjo tras la denuncia de tres trabajadores, que hacían jornadas diarias de entre 12 y 13 horas.