La planta de Aguas de Teror suspendió su actividad desde ayer y hasta el lunes, que será cuando se reanude nuevamente, por respeto al trabajador fallecido, Moisés Navarro Santana y por solidaridad con su familia. También es para facilitar la investigación que está realizando la Guardia Civil sobre este accidente que ocurrió la noche del jueves en el interior de la fábrica y que se cobró la vida de un trabajador. Los investigadores tienen el claro objetivo de esclarecer la causa por la que se produjo este trágico suceso.

Según la propia empresa municipal, ha sido la primera vez que ocurre en esta empresa centenaria un accidente de este tipo en Aguas de Teror, desconociéndose las causas por las que se produjo.

Aguas de Teror transmitió a la familia de Moisés Navarro las condolencias por el desafortunado accidente, prestándoles toda la colaboración ante la situación que está viviendo.

Las muestras de consternación eran evidentes entre los vecinos del casco de Teror ayer tarde. Hay que tener en cuenta que la gran mayoría de los empleados de esta empresa son vecinos del municipio terorense. El día gris, la lluvia persistente y las bajas temperaturas -unos 16 grados a las 17.00 horas- acompañaban a la tristeza de los terorense por la pérdida de Moisés.