La delegada del Gobierno en Canarias, Mercedes Roldós, ha aclarado este sábado por la mañana que el vertido tras el accidente de un ferry en el puerto de Las Palmas es de fuel ligero, y por tanto no necesita barreras de contención.

Los trabajos entonces se centran en facilitar la evaporación del fuel: "Lo que se hace son pasadas con las hélices de los barcos para favorecer el batimiento del mar".

Roldós destacó la coordinación entre las diferentes administraciones, y explicó que se está estudiando la evolución de la mancha, también con medios aéreos.

Las dos playas cercanas, Alcaravaneras y La Laja, están abiertas al público porque no ha llegado mancha hasta allí.

El nivel de la emergencia por el vertido está en escala insular (nivel 2).