Siete jóvenes han sido multados por la Policía Local de Gandia tras propinar una brutal paliza a otro la mañana del pasado domingo en la playa de esta ciudad. Los hechos ocurrieron alrededor de las 7 de la mañana, hora en la que se cierran las discotecas de la zona.

En un vídeo que corrió como la pólvora a través de las redes sociales durante el día de ayer, se ve cómo un joven yace en el suelo mientras le cae una lluvia de patadas y puñetazos por todo el cuerpo. Son golpes sin miramientos en la cabeza, la espalda, las costillas o las piernas. Son 36 segundos espeluznantes en los que siete chicos rodean al agredido.

Según ha podido averiguar este periódico, todo se inició en el interior de una discoteca entre dos grupos de chicos. Al parecer, quisieron acabar de arreglar sus diferencias en la calle y el resultado fue el que se aprecia en el vídeo. El punto donde se produce la pelea está próximo al hotel Bayrén y un conocido restaurante de la playa gandiense.

Las imágenes las tomó un vecino de esa vía. En los primeros instantes se ve al grupo corriendo hacia el joven agredido. Este se cae al suelo, rápidamente es rodeado y empieza la paliza. De fondo se oyen gritos y una voz que les dice «¡abusones, abusones!», a la que hacen caso omiso. Algunos se han quitado la camiseta y hay otro que incluso le golpea con una botella de cristal en la cabeza.

A los 36 segundos de iniciarse el vídeo aparece la Policía Local y el grupo echa a correr. A esas horas, cada fin de semana se despliega por la playa el dispositivo de control de salida de las discotecas, que tiene como objetivo atajar actitudes de este tipo y ruidos que resultan molestos a los vecinos.

Agresores de Madrid

Los agentes lograron identificar a los agresores, que, según ha podido averiguar este periódico, son naturales de Madrid y estaban en pisos de alquiler en la playa. Todos ellos fueron multados por alteración del orden público y violar la ordenanza de convivencia cívica, por lo que cada uno pagará alrededor de 1.000 euros.

El agredido no sufrió heridas de gravedad. Ninguno de los dos grupos quiso presentar denuncia contra el otro, según ha podido saber este periódico. La Policía Nacional tampoco detuvo a ninguno de ellos debido a la ausencia de heridas.