Ignacio Javier Sarmiento González, de 50 años, vecino de Los Llanos, en Teror, falleció el pasado viernes día 1 de septiembre en el Hospital Doctor Negrín. Durante la madrugada del día 25 de agosto recibió un golpe en la cabeza, propinado con un sacho en El Toscón Alto, en la capital grancanaria. La discusión inicial con varias de las personas que estaban en el momento de la agresión en El Toscón se había iniciado en un bar de la Villa Mariana por "la caída de una copa".

El presunto autor del golpe en la cabeza de Ignacio S. G., a quien sus amigos y familiares llamaban Nacho, es un vecino de El Toscón Alto, de unos 25 años y se halla en prisión. El Cuerpo Nacional de Policía lo detuvo y puso a disposición judicial. El titular del juzgado de guardia de Las Palmas de Gran Canaria que se hizo cargo de este suceso, tras la toma de las declaraciones y primer análisis de las pruebas, dictó su ingreso en la cárcel.

El arrestado estaba acusado, en un primer momento, de cometer un presunto delito de lesiones, que pasó a ser de homicidio tras el fallecimiento de la víctima el 1 de septiembre.

La investigación de los hechos que dieron lugar al fatal desenlace ha quedado en manos de agentes de Homicidios de la Policía Nacional. Mientras el cuerpo de investigadores mantiene absoluto hermetismo sobre el caso, se han desatado varias versiones sobre lo sucedido, comentadas y oídas en distintas poblaciones. No sólo en Teror, de donde era la víctima, o en El Toscón, donde vivía el agresor, sino también en los barrios vecinos de Los Giles y Las Mesas. Asimismo, los ecos del suceso han llegado a las redes sociales.

Lo trágicamente cierto en todas las versiones es que hay una persona fallecida. Los daños por el golpe en la cabeza con un sacho tuvieron a la víctima debatiéndose entre la vida y la muerte durante una semana en la Unidad de Medicina Intensiva (UMI) del Hospital Doctor Negrín.

La Policía mantiene "la investigación abierta" y ha confirmado que "la toma de declaraciones y las pesquisas aún no han finalizado".

Según amigos y familiares, Nacho fue víctima de una discusión en un bar de Teror tras caérsele una copa de las manos. Eso provocó una discusión y que después le rayaran su coche y rompieran un retrovisor.

Existe controversia sobre cuándo se produjo la discusión. Unas versiones sostienen que ocurrió el mismo día de la agresión. Otras hablan de una semana antes.

"Él fue a El Toscón Alto para que le pagaran los daños en su coche, sobre todo el retrovisor roto", explicó un amigo, que recordó que Nacho estaba soltero y que trabajaba como conductor de ambulancias.

Otro amigo indicó que le hicieron "una encerrona en el cruce de las calles El Armero y El Cartero de El Toscón Alto. Primero, estuvo discutiendo con dos, con los que al parecer había discutido ya en Teror. Y un tercero llamó a su hermano, que fue quien dio con el sacho dos golpes a la luna del coche y un tercero, a traición, a Nacho, que estaba al lado".

Otra de las versiones sobre lo ocurrido afirma que el fallecido "fue armado" a El Toscón. Y otra sostiene que los vecinos del barrio capitalino implicados en la discusión fueron a Teror para llegar a un acuerdo con Nacho, quien "respondió con disparos de balines".

Por su parte, la familia del fallecido niega de forma rotunda que él llevase un arma, aunque reconoce que era cazador y que fue un profesional del tiro olímpico. "Los policías no constataron la existencia de un arma donde fue golpeado. No la llevaba y estaba solo", aseguró un hermano del fallecido.