Joaquín Nuva se encontraba en el interior de la discoteca Butterfly cuando suelo se desplomó bajo su pies. El artista, que forma parte del espectáculo que se ofrecía en el local la noche del sábado al domingo, aseguró que se "vivieron momentos de mucho nerviosismo", aunque se congratuló de que finalmente todo haya quedado "en un susto enorme".

Mientras la artista Marta Monroe cantaba de forma despreocupada la canción de Fangoria, A quien le importa, parte del forjado de la discoteca de ambiente gay, situada en el número 10 de la avenida Rafael Puig Lluvina en Playa de las Américas, se vino abajo durante la noche del pasado sábado mientras dentro del local se celebraba la fiesta Hot Party a la que habían acudido un nutrido grupo de personas entre las que había tinerfeños, pero también de otras nacionalidades al tratarse de un lugar muy turístico. La fiesta contaba con la actuación de Nuva, así como la animación de gogós y espectáculos de striper.

El socavón se tragó a quienes se encontraban alrededor del escenario disfrutando de la actuación de Nuva y al desplomarse el suelo, los asistentes cayeron desde una altura de alrededor de tres metros hasta llegar a la planta que estaba situada debajo del local, donde había un antiguo bingo que por fortuna no se encontraba en funcionamiento. Desde los primeros momentos, "tanto los dueños como los clientes ayudaron a atender a los heridos hasta que llegaron los bomberos y las ambulancias". Aunque la tensión era máxima, porque ninguno de los asistentes sabía con seguridad si el resto de pavimento podía también venirse abajo y al haber caído a varios metros de altura era difícil acceder hasta donde se encontraban los heridos.

Después la caída, Nuva aseguró que se encuentra bien y quiso agradecer todas las muestras de cariño que le han llegado. "Siento muchísimo que ocurriese esta terrible situación", manifestó y señaló que tiende su mano a todos los heridos para ayudar en lo que pueda.