Un hombre de 45 años falleció este jueves al ser arrollado por su propio coche en un aparcamiento en Mallorca. La víctima quedó atrapada entre el vehículo todoterreno y una columna y según las primeras pesquisas falleció por asfixia. Según parece, dejó el coche en una pendiente sin poner el freno de mano, lo que desencadenó el accidente, explicaron fuentes policiales.

Los hechos fueron descubiertos hacia las once menos cuarto de la mañana, cuando un testigo encontró a la víctima en el aparcamiento privado de un inmueble.

Al lugar acudieron patrullas de la Guardia Civil y la Policía Local, así como efectivos del Ib-Salut y los Bombers de Mallorca. Los sanitarios no pudieron más que certificar el fallecimiento del hombre, identificado como Manuel G.N., de 45 años.

La Guardia Civil puso en marcha una investigación para esclarecer lo ocurrido. Los agentes llevaron a cabo una detenida inspección ocular de la escena para recopilar pruebas.

Las primeras pesquisas apuntan a que la víctima se apeó del automóvil sin haber accionado correctamente el freno de mano. El vehículo todoterreno se encontraba en una pendiente y empezó a circular marcha atrás sin control. Fue entonces cuando arrolló a la víctima y la aprisionó contra una columna. La investigación de los agentes apunta a que el hombre falleció asfixiado al quedar atrapado.