Estaba pasando con mi mujer y mis dos hijos cuando oímos una explosión. Al girar la vista vimos unas llamas que salían de una tercera planta. Llamé al 112 me identifique y expliqué la situación. Así comienza el testimonio del bombero del Consorcio José Francisco Naranjo, que junto a Booz García y otro vecino, rescataban a José, el inquilino del 3ºD del edificio situado en el número 59 de la avenida Mesa y López, en donde en la tarde de ayer viernes se produjo un incendio.

"Subía las escaleras corriendo y dando instrucciones a los vecinos que encontraba. Les avisaba del peligro porque ya en la tercera planta el plano neutro (separación entre la zona caliente y fría) llegaba a un metro y medio", detallaba José Francisco Naranjo.

"Vi a dos personas mayores desorientadas y bajamos un tramo de la planta. Volví a subir y me dirigí a la puerta de la vivienda incendiada. Le di una patada y grité por si había alguien más. Al no contestar, y tras asegurarme que no había nadie, volví a cerrar la puerta para evitar que el fuego se siguiera alimentando".

Fue en ese momento cuando el bombero se encontró con la víctima. "Al darme la vuelta vi un hombre gritando y a la víctima inconsciente en el suelo con quemaduras en cara y brazos. Mientras intentaba socorrer al hombre con la ayuda del vecino es cuando llega la Policía . "Les pedí que entraran en la vivienda y metimos a la víctima para evitar que tragara más humo".

El afectado estaba inconsciente. "Estaba completamente negro", acertaba a decir Booz aún nervioso por lo sucedido. Presentaba importantes quemaduras en las manos, el pecho y la cara. "Le quitamos las cenizas que tenía en la boca que le impedían respirar, le limpiamos la cara con un paño húmedo y lo pusimos en posición de seguridad", señalaba Naranjo José recobró la consciencia al poco tiempo mientras el bombero solicitaba a sus compañeros de la capital que le llevaran oxígeno y una camilla nido para rescatarlo.

"Una vez pasado un par de minutos, José recuperó la consciencia y pude volver a preguntar si estaba el solo y como se encontraba. Nos mantuvimos dos policías y el vecino hasta que aparecieron los bomberos y dieran por sofocado el incendio".

Naranjo fue uno de los dos bomberos del parque de Gáldar que el pasado 23 de mayo participaron en el rescate de un hombre que estaba en apuros en la costa de Agaete.

Los bomberos que se personaron en el lugar consiguieron controlar en cuestión de minutos. Asimismo, cuatro ambulancias y un vehículo de intervención rápida del Servicio de Urgencias Canario (SUC) se presentaron para atender a los afectados. Como indicó el responsable de Coordinación y Recursos del SUC, José Gutiérrez, el inquilino de la vivienda estaba semiconsciente y presentaba quemaduras de segundo y tercer grado, con heridas que en un primer momento se calificaron de menos grave a la espera de una valoración más profunda. Los sanitarios atendieron a dos personas por inhalación de humo y crisis de ansiedad.