Le pidieron al taxista que les llevara a un callejón sin salida del barrio capitalino de San Francisco. Una vez allí, le estrangularon y golpearon para robarle la recaudación. La Policía Nacional consiguió identificar a los cuatro autores, dos menores, de 14 y 15 años, y dos jóvenes de 18, que ya han sido detenidos.

Los hechos se remontan al pasado 31 de mayo cuando el profesional del taxi manifestó que cuatro jóvenes se subieron a su coche mientras trabajaba. Estos fueron quienes le guiaron hasta el citado barrio capitalino, característico por las calles estrechas y en algunos casos empinadas. Los clientes conocían el lugar, por lo que indicaron al conductor que se metiera por una calle sin salida. Allí fue cuando, según la denuncia del taxista, trataron de estrangularlo, le golpearon y le robaron la recaudación, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía de Canarias en un comunicado. En la nota se añade que el conductor tuvo que ser asistido en un centro sanitario debido a las lesione sufridas por la agresión.

Los agentes de la comisaría del distrito centro de la capital grancanaria iniciaron una investigación que permitió identificar a dos jóvenes de 18 años y a dos menores de 14 y 15 como presuntos autores del ilícito penal, quienes fueron detenidos por un delito de robo con violencia. Asimismo, pusieron los hechos en conocimiento de la Sección de Menores de la Fiscalía de Las Palmas, que ordenó entregar a los dos menores a sus tutores legales.

Las pesquisas determinaron que, además, uno de los jóvenes arrestados era el presunto autor de otros tres robos con fuerza cometidos el presente mes en distintos centros educativos de la capital grancanaria, durante los cuales fueron sustraídos varios dispositivos electrónicos.

En el sector del taxi, Antonio León, presidente de la Asociación de Titulares de Licencias de Autotaxis de Canarias (Atlatc), y Gorki Bethencourt, su homólogo en la Asociación Profesional TeleTaxi, coincidieron en señalar que en determinadas horas del días apenas hay presencia policial en las calles, sobre todos en los barrios más alejados del centro. "Si los llamas están cerca, acuden rápidamente, pero no se les ve físicamente circulando con los vehículos", apostilló el primero, mientras que el segundo apuntó que cuando existen grandes eventos "no hay presencia policial ninguna". "Hoy [por ayer] llevo varias horas trabajando", agrega, "y apenas he visto tres o cuatro policías locales por la calle". "La policía no está", sentenció.

Pese a la poca presencia policial, ambos recalcan que Las Palmas de Gran Canaria es una urbe segura. "En una ciudad con 400.000 habitantes, y cada día vienen 300.000 más; es normal que pase lo que pasa en todos lados", declaró Bethencourt, quien aseguró que existen "rachas". "Hay veces que no ocurre nada durante meses y de repente estás dos o tres meses que es raro que no haya un incidente". Por su parte, Antonio León indicó que la capital, en la actualidad, es "segura". "Ahora mismo no es lo que estaba ocurriendo años atrás, cuando te sentías bastante inseguro, se notaba que había mucha más delincuencia que la que hay ahora".