El empresario Delfín Suárez Almeida falleció el miércoles a los 90 años en Las Palmas de Gran Canaria. La familia celebró su sepelio en la más estricta intimidad, como era su deseo.

Suárez Almeida era un empresario muy discreto y precavido al que no le gustaba aparecer en los titulares de la prensa, así como tampoco simpatizaba con resaltar demasiado en la vida público. Como demuestra su larga vida profesional, Delfín Suárez sabía que el éxito debe centrarse más en la constancia en el trabajo, como también trabajar con prudencia, en la diversidad de los negocios, y no en un único sector, y en apostar sobre seguro.

Fue creador de la empresa Kalise en la década de los 60, de forma discreta, para ser ahora un gigante en el sector, no sólo en Canarias y en España, sino también con presencia en más de treinta países. Kalise fue un éxito y una acertada política de alianzas, compras y fusiones desembocó en la creación del Grupo Kalise Menorquina, ya convertido en un auténtico gigante de los helados a nivel nacional y con proyección internacional con importantes inversiones en Francia.

Sin embargo, también apostó en inmobiliarias y en el sector turístico. Uno de los pocos reveses empresariales fue la compra de Servicio Insular de Abastecimiento de Leche SA (Sialsa). El Grupo Kalise Menorquina no asumió la deuda de nueve millones de la empresa y provocó la quiebra y un ERE.