Un incendio presuntamente provocado en un colchón de una clínica para personas con enfermedades mentales en Tafira Alta provocó en la tarde de ayer la evacuación de unos 55 pacientes que se encontraban en esos momentos en el centro. Dos personas tuvieron que ser atendidas por intoxicación de humo y crisis de ansiedad, ambas de carácter leve. Los bomberos apagaron las llamas, que afectaron por completo a la habitación en la que se originó el suceso. La Policía Nacional ha abierto una investigación para conocer las causas de lo ocurrido.

Los hechos ocurrieron en torno a las 17.50 horas cuando el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) recibió una alerta de que en la Clínica Bandama, situada en la calle La Tornera del citado barrio capitalino, se había producido un incendio en uno de los dormitorios. Mientras se movilizaba a los bomberos de los parques de Vegueta y Miller Bajo, los propios empleados comenzaron a desalojar al poco más de medio centenar de pacientes hasta dos zonas comunes e iniciaron las tareas para apagar el fuego.

Cuando los agentes del cuerpo de extinción de incendio se personaron las llamas estaban prácticamente apagadas, aunque tuvieron que encargarse de sofocar el fuego por completo. Para ello, utilizaron unos 200 litros de agua, según indicaron fuentes municipales. Asimismo, procedieron a ventilar las habitaciones próximas que se habían inundado de humo.

Una de las salas quedó prácticamente calcinada, mientras que las contiguas resultaron afectadas por la humareda provocada y el calor, que dañó falsos techos. Por ello, los bomberos recomendaron que quedaran inutilizadas hasta que se subsanen los daños.

Al lugar también se desplazaron varias ambulancias del Servicio de Urgencias Canario (SUC). Los sanitarios procedieron a atender a un hombre que sufrió una intoxicación por humo de carácter leve, por lo que fue evacuado al centro de salud de Canalejas, según informó el 112. El otro atendido tuvo una crisis de ansiedad de carácter leve y fue atendido en el lugar de los hechos.

La Policía Nacional, por su parte, comenzó las pesquisas para determinar cómo se había iniciado el incidente. Las fuentes consultadas indicaron que todo apunta a que fue un incendio provocado, aunque falta por determinar si de manera intencionada o de forma accidental. Y es que todo se originó en un colchón de una habitación de la clínica, en la que está prohibido fumar ni tampoco tener objetos que prendan fuego.

Este centro, con más de medio año de historia, es un referente de la salud mental en Canarias, según señala en su página web. En el edificio de Tafira Alta, situado en plena zona residencia, cuenta con 90 camas repartidas habitaciones dobles o individuales y apartamentos privados para los pacientes. Asimismo, tiene espacios exteriores con terrazas, solárium y piscina. Precisamente, a estas zonas fue adonde fueron evacuadas las aproximadamente 55 personas que se encontraban en el momento del incendio en las instalaciones hasta que se extinguieron las llamas.