Una patera con dos personas fallecidas a bordo llegó en la tarde de ayer a las costas del municipio malagueño de Vélez-Málaga, donde la Policía Nacional busca al resto de sus ocupantes, que huyeron del lugar al alcanzar tierra.

En torno a las 14.30 horas el 112 ha recibido una llamada que alertaba de la llegada de una patera a una playa de este municipio, por lo que avisaron a Salvamento Marítimo, Policía Nacional, Policía Local, Guardia Civil y servicios sanitarios, según indicaron a Europa Press fuentes del servicio de emergencias.

Los agentes de la Policía Nacional que han llegado al lugar de los hechos confirmaron la presencia de dos fallecidos en la embarcación, que se trata de una neumática de cuatro metros de eslora, según señalaron fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Málaga.

La Policía Nacional estableció un dispositivo de búsqueda para encontrar al resto de los tripulantes, que huyeron del lugar nada más alcanzar tierra, y durante la tarde de ayer consiguieron localizar a uno de ellos que presenta síntomas de hipotermia.

Por otro lado, agentes de la Guardia Civil de Ceuta recuperaron a primera hora de la tarde de ayer en la playa de San Amaro, ubicada en la bahía norte de la ciudad autónoma, en aguas del Estrecho de Gibraltar, el cuerpo sin vida de un varón de origen subsahariano indocumentado arrastrado hasta la línea de costa por las mareas.

Según informaron fuentes de la Comandancia local de la Benemérita, hasta el lugar donde ha sido localizado el cadáver se ha trasladado el forense para su levantamiento. Aunque "aparentemente" la causa probable de la muerte del migrante parece haber sido asfixia por inmersión, la autopsia deberá confirmar o no este diagnóstico preliminar. La Unidad Orgánica de Policía Judicial del Instituto Armado ha abierto una investigación para intentar identificar al fallecido y esclarecer las circunstancias de su fallecimiento, que podría estar vinculada a un intento fallido de alcanzar la península por la vía marítima.

Casi 600 inmigrantes

La Guardia Civil ha rescatado hasta primera hora de ayer doce cadáveres después de que el pasado lunes naufragase una embarcación con 40 personas a bordo en la zona de Barbate (Cádiz). Las batidas de las Fuerzas de Seguridad marroquíes en el entorno de Ceuta tras los saltos en grupo protagonizados con éxito por hasta 600 indocumentados durante el verano han reducido casi a cero desde entonces hasta ahora la presión migratoria de subsaharianos sobre la ciudad autónoma.