Una vecina de la calle Lanzarote de El Fraile, en Arona (Tenerife, llamó a la Policía Local quejándose de las filtraciones de agua que sufría en su azotea. La sorpresa saltó cuando los agentes se presentaron en el inmueble y al inspeccionar los cuartos lavaderos, los cuales se encontraban abiertos, hallaron dos corderos vivos y al menos tres sacrificados.

Los funcionarios hallaron abundante agua en la azotea y en un lado de la misma, un brasero de carbón, en un cuarto lavadero dos corderos vivos y en otro, tres animales descuerados y limpios de vísceras, sobre una mesa. Todos presentan en su oreja derecha una etiqueta de color verde. Interrogada la alertante manifestó que la noche antes tuvo lugar una fiesta en la azotea y que los animales pertenecen a los vecinos de dos plantas diferentes.

Los policías se presentaron en los domicilios que refirió la denunciante, pero nadie contestó a las llamadas, por lo que se dio aviso a la protectora de animales Acarraut, que se hizo cargo de los animales vivos, en tanto que el servicio de limpieza del Ayuntamiento de Arona procedía a la limpieza del entorno.

Los policías continúan con las indagaciones para determinar quién o quienes llevaron a cabo la matanza y sobre todo en condiciones tan poco higiénicas.