La Policía Judicial de la Guardia Civil investiga el hallazgo en la tarde de ayer de un cadáver flotando y con numerosos golpes en la cabeza y en el resto del cuerpo a unos 30 metros de la costa de Puerto Rico, en el municipio de Mogán. Los investigadores del Instituto Armado están a la espera de la autopsia para determinar las causas del fallecimiento, que fue identificado como un ciudadano alemán de 52 años y residente en el sur de Gran Canaria. Las primeras hipótesis apuntan a que podría ser accidental y que los golpes fueran provocados por las rocas.

Los hechos se produjeron pocos minutos después de las dos de la tarde cuando los ocupantes de un barco de viajes para turistas visualizaron un bulto en el agua. Cuando se acercaron comprobaron que se trataba de un cadáver que estaba flotando. Una zódiac que se presentó en el lugar procedió a subir el cuerpo, que estaba completamente vestido y que contaba con documentación. Se trataba de un súbdito alemán, nacido en 1966 y que reside en el complejo de apartamentos Roque Nublo, situado en la avenida Veneguera de Puerto Rico.

Los restos humanos fueron trasladados hasta un pantalán del muelle deportivo, donde quedó custodiado en un principio por agentes de la Guardia Civil del puesto de Puerto Rico - Mogán y por la Policía Local de Mogán. Asimismo, el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112 del Gobierno de Canarias movilizó a Salvamento Marítimo, una ambulancia de soporte vital básico del Servicio de Urgencias Canario (SUC) y el médico del centro de salud de Playa de Mogán, que certificó la muerte del ciudadano alemán, según indicaron fuentes cercanas a la investigación de los hechos.

Ante la presencia de los golpes, sobre todo uno fuerte en la cabeza, acudieron al lugar agentes de la Policía Judicial del puesto de la Guardia Civil del municipio sureño y sus compañeros de la Comandancia de Las Palmas para iniciar las pesquisas con las que determinar las causas de la muerte.

Sobre las seis de la tarde también se personó la comitiva judicial, con la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de San Bartolomé de Tirajana, María de los Milagros Vilán Santos, a la cabeza. Junto con los guardias civiles, inspeccionaron el cadáver que yacía en uno de los pantalanes. El levantamiento no se produjo hasta ya pasada las siete de la tarde, cuando el furgón de traslados llevó el cuerpo hasta el Instituto de Medicina Legal de Las Palmas de Gran Canaria.

Los investigadores están a la espera de conocer los resultados de la necropsia para así determinar si las pesquisas avanzan hacia una muerte accidental o si, en cambio, se dirigen a una muerte violenta. En una primera inspección ocular del cadáver, los indicios apuntan a que el ciudadano alemán pudo caerse al mar de manera accidente y morir ahogado o por los golpes sufridos al chocar contra las piedras. En cualquier caso, se descarta que estuviera bañándose en la costa ya que se encontraba totalmente vestido, apuntaron las mismas fuentes.