Caso Abierto - La Provincia - Diario de Las Palmas

Caso Abierto - La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Temporal

¿Estamos preparados para nuevos episodios de gota fría?

Los expertos aseguran que serán más frecuentes e intensas y reclaman nuevas soluciones técnicas y preventivas

Vecinos sacan agua de sus locales en Orihuela. EFE

El sureste de España hace balance de los daños causados por las lluvias torrenciales que trajo consigo la terrible gota fría de la pasada semana. Una tragedia que costó la vida a seis personas y que, según los expertos, puede repetirse si no se toman medidas efectivas que palíen los efectos de las inundaciones. Propuestas que van desde un plano técnico, como colectores de lluvias y estanques de tormentas, a otras que atañen a la vertiente humana, como la prudencia y la información personalizada sobre la predicción meteorológica. Los cálculos indican que, en el conjunto del país, cerca de tres millones de personas viven en riesgo alto de inundación, y de ellas alrededor de dos en el litoral mediterráneo.

Tres millones de españoles viven en zonas con riesgo alto de inundación, de las cuales dos de ellas en el litoral mediterráneo

La última gota fría ha sido de una extrema virulencia. Las lluvias en la Vega Baja de Alicante han sido las más devastadoras en 140 años, según la AEMET. ¿Por qué este fenómeno se concentra con más frecuencia en el Mediterráneo? La explicación la da Jorge Olcina, profesor del Departamento de Análisis Geográfico Regional de la Universidad de Alicante y presidente de la Asociación de Geógrafos de España. "La razón es el calor de las aguas del propio mar, que es la materia prima que utilizan las situaciones de fuerte inestabilidad -gota fría- para formar nubes muy cargadas de agua y energía", indica este experto, una de las mayores autoridades del país en esta materia. Y alude a otra circunstancia que está ahí y añade más preocupación: el cambio climático.

Las precipitaciones anegaron los bajos de muchas casas, como esta de la localidad de Dolores, en Alicante. EFE

"Son previsibles gotas frías más intensas y frecuentes en el futuro. Los modelos de cambio climático están señalando la posibilidad de que, con el calentamiento del Ártico, la corriente en chorro de nuestras latitudes, que es la gran reguladora del tiempo atmosférico en nuestra zona, circule más lenta y lo haga produciendo más ondulaciones, en forma de meandros, con lo cual la formación de bolsas de aire frío en las capas altas de la atmósfera, sobre nuestras latitudes ibéricas, será más frecuente", explica.

La gran cuestión es si estamos preparados. "En absoluto", zanja Olcina en tono negativo. "Se dice que estas situaciones son extraordinarias, pero ¿lo son si las vemos todos los años? A la vista está lo que pasa estos días. No creo que estemos preparados para episodios similares. El Consorcio de Compensación de Seguros del Estado lleva años avisando de que las inundaciones son el principal riesgo natural en España. Pero esto ocurre y luego se olvida", critica Manuel Regueiro, presidente del Colegio de Geólogos de España. A las consecuencias económicas, con pérdidas millonarias para la agricultura, hay que unir las ecológicas. Sureste y Mediterráneo son espacios que sufren más que el resto en España el grave problema de la desertificación del territorio, circunstancia que se verá agravada por las últimas lluvias. "El arrastre del agua se lleva por delante la vegetación y eso va a aumentar la desertificación", incide Regueiro.

Riesgo inundación

Infogram

Estado y comunidades autónomas han avanzado mucho en las dos últimas décadas, con planes sectoriales y mapas cada vez más detallados de riesgos naturales - la Comunitat Valenciana dispone desde 2003 de su propio plan territorial, ampliado y mejorado en 2015 - pero la impresión general de quienes investigan el fenómeno de las inundaciones es que falta consolidar toda esa acción en el último término, la esfera municipal. "Los ayuntamientos tienen que concienciarse", dice Regueiro, que asegura haber examinado distintos PGOU (Plan General de Ordenación Urbana) de municipios en los que se cita "de pasada y sin darle prioridad" al problema de las inundaciones. "Hay que ver si la prioridad es la población o construir más y más casas para recaudar el IBI", protesta.

"España necesita un gran plan de adaptación al cambio climático que suponga la preparación de los territorios", dice Jorge Olcina, presidente de la Asociación de Geógrafos Españoles

"En la escala local está la clave", añade Olcina. Y es que esto entronca con la masiva urbanización de zonas costeras que se ha producido en las últimas décadas. "Es uno de los problemas importantes. Pero junto a ello también la necesidad de conservación del dominio público hidráulico, que se ha maltratado mucho, bien porque se ha convertido en un vertedero de residuos o bien porque se ha construido en él", explica el presidente de los geógrafos españoles, para quien en los ayuntamientos se ha sido "muy permisivos" a la hora de otorgar licencias, "a veces desconociendo que iban a estar ubicadas en zonas de riesgo de inundación. Los municipios deben tener mapas detallados de riesgo, como señala la actual Ley del Suelo de 2015. Y deben dotarse, en sus plantillas, de técnicos especialistas -geógrafos, geólogos, ambientalistas- en gestión de los territorios de riesgo", subraya Olcina, que se felicita, asimismo, por el esfuerzo y eficacia de los cuerpos de seguridad, bomberos, protección civil y la UME en la última crisis. "Tenemos el mejor sistema de gestión de emergencias de toda Europa", proclama.

Orihuela es una de las localidades que más ha sufrido las inundaciones. EFE

De cara al futuro, Regueiro reclama soluciones técnicas que ayuden a mitigar el efecto de las lluvias torrenciales, como estructuras de laminación del agua que contengan los escombros arrastrados por las riadas y estanques de tormentas que sirvan para acumular los volúmenes más incontrolables. Tradicionalmente, se ha apostado por canalizaciones y cauces artificiales, pero siempre con el riesgo de que, ante una situación así, el río regrese a su tendencia y recupere su senda original. Es lo que los expertos conocen como el peligro de la 'llanura de inundación'. "El río se encauza pero aumenta la velocidad del agua y puede que no haya manera de contenerla", advierte Regueiro. "Esas canalizaciones deben hacerse con la capacidad suficiente y adaptadas a las condiciones climáticas de cada zona. En el litoral mediterráneo cualquier encauzamiento que no esté dimensionado para admitir lluvias de 800 litros por metro cuadrado no sirve. Y en las ciudades cualquier colector de alcantarillado que no esté dimensionado para asumir 100 litros en una hora, tampoco", argumenta Jorge Olcina.

"España necesita un gran plan de adaptación al cambio climático que suponga la preparación de los territorios. No solo es actuar en la parte energética, con reducción de emisiones y apuesta por energías alternativas, que es muy necesaria, sino en dar un paso más y preparar los territorios al cambio climático, que en nuestro país va a suponer la frecuencia mayor de extremos atmosféricos. Este es el gran reto de los gobiernos -estatal, autonómicos y locales- de las próximas décadas. Y hay que empezar a tomárselo en serio", añade. Junto a ello, los expertos apuestan por el diseño de sistemas personalizados de alerta, basados en el uso de los teléfonos móviles, y por estimular la cultura de la prevención del riesgo. "Un ciudadano informado es un ciudadano seguro", subraya Manuel Regueiro. "Hay mucho desconocimiento en la sociedad de que se vive en zonas de riesgo, no hay educación para ello", destaca el presidente de la Asociación de Geógrafos Españoles.

Compartir el artículo

stats