Un terrible crimen tuvo lugar en la ciudad inglesa de Sheffield hace unos meses. Los hermanastros Sarah Barrass y Brandon Machin asesinaron a dos de sus hijos y lo intentaron con los otros cuatro para "evitar que el sistema se hiciera cargo de los niños".

Blake y Tristan, los dos hijos mayores de la pareja, fueron encontrados sin vida en sus respectivas camas cuando la policía llegó a la casa, tal como informa el medio inglés DailyMail. Fallecieron ambos tras haber sido estrangulados. Los otros cuatro infantes estaban drogados en la bañera en un intento de ahogarlos.

Los dos asesinos han sido condenados a cadena perpetua (siempre revisable) y a pasar al menos 35 años en prisión por en asesinato de los dos niños y el intento de asesinato de otros cuatro.