Canarias se ha convertido en los últimos años en refugio de los componentes de las mafias italianas para evitar a las fuerzas de seguridad de su país. El último caso ocurrió recientemente, "en las últimas semanas", según la Policía Nacional. El capo de uno de los clanes mafiosos más violentos fue detenido en un apartamento de Las Burras, en el sur de Gran Canaria, por su presunta pertenencia a un grupo dedicado al tráfico de drogas y por actuar como enlace entre su organización y otros clanes de su país. En la operación participaron agentes de la Brigada Provincial de la Policía Judicial que colaboraron con los carabinieri.

El arresto se llevó a cabo en el marco de una operación antimafia denominada Neve Di Marzo. El responsable de la conocida como La Cuarta Mafia o la Società Foggiana tenía una orden europea de detención y entrega que había sido interpuesta por las autoridades italianas por tráfico de drogas, según informó ayer la Dirección General de Policía en un comunicado.

El ahora detenido era buscado por ser uno de los integrantes de mayor notoriedad de una organización criminal basada en la ciudad de Vieste, provincia de Foggia, en la turística región de Apulia situada al sur del país. Este grupo delictivo tiene un "alto grado de violencia y crueldad de sus integrantes", que utilizan armas largas como el Ak-47, conocido popularmente como Kalashnikov, y fusiles del calibre 12 para acabar con la vida de los miembros de otros clanes.

No obstante, La Cuarta Mafia posee un amplio historial criminal en su haber con más de 300 muertos en los últimos 40 años, según una publicación de la edición digital de la BBC británica. Entre ellos, el asesinato de los mafiosos Mario Luciano Romito y su cuñado Matteo de Palma. Ocurrió en agosto de 2017 cuando un furgón se aproximó al Volkswagen negro que circulaba por una carretera provincial de San Marco en Lamis y en el que iban Romito y De Palma. Varias personas realizaron disparos con sendos Kalashnikov y asesinaron a ambos. Dos agricultores, que nada tenían que ver con las organizaciones pero que fueron testigos de lo ocurrido, también perdieron la vida. Todo para liderar el tráfico de cocaína, hachís y marihuana no sólo en Italia, sino también en el continente europeo.

El cabecilla detenido en el sur de Gran Canaria actuaba de enlace entre su organización y otros grupos mafiosos italianos, como la banda local la Gargánica e incluso organizaciones criminales albanesas. Durante la intervención de los agentes de la Policía Nacional, después de que la Fiscalía de Italia cursara una orden europea de investigación, se llevó a cabo un registro en el domicilio del cabecilla, situado en la calle La Gloria del municipio de San Bartolomé de Tirajana, durante el cual se encontraron diferentes efectos que demostraron la relación del investigado con la organización mafiosa, señala el comunicado. "El registro se llevó a cabo tras ser cursada dicha orden -a través de la Fiscalía de Relaciones Internacionales- con la colaboración de dos militares de Policía Italiana de Arma dei Carabinieri y en él se intervino importante documentación que demuestra la vinculación del detenido" con La Cuarta Mafia, finaliza la nota de la Dirección General de la Policía.

La Società Foggiana, que hasta hace tres años había pasado prácticamente desapercibida en el país itálico pese a que cuenta con 30 años de historia, es ya considerada por los medios italianos como "la nueva Gomorra". En un artículo publicado por la revista Panorama se apunta que su pertenencia se traspasa como una herencia "o como una enfermedad" entre padres e hijos. Y se señala que la manera de financiarse no se ciñe exclusivamente en el narcotráfico; también existe la extorsión. "Todos los constructores tienen que pagar". Otros comerciantes incluso lo hacen sin haber recibido antes ningún tipo de amenaza para así obtener la protección antes de sufrir cualquier tipo de ataque. También tienen negocios ilícitos en la gestión de los residuos, las máquinas tragaperras y la contratación ilegal, según Panorama.