La empresaria Renuka Satyani, de 38 años, que fue detenida por la Policía Nacional como presunta autora de los delitos de obstrucción a la justicia, amenazas y lesiones a un inversor inmobiliario quedó en libertad con cargos tras pasar a disposición judicial. Los hechos ocurrieron en una sala de juntas del Real Casino de Tenerife en la mañana del pasado 21 de noviembre, en la que la ahora acusada y la víctima habían quedado supuestamente para intentar llegar a un acuerdo extrajudicial, después de que el afectado demandara a la empresa de Renuka para intentar cobrar el dinero que le deben. Uno de los matones se acercó al inversor y le pegó un puñetazo que impactó en su oreja izquierda y en la parte lateral trasera de la cabeza tras exigirle que quitara la demanda.