Papá, ahora ya no caminarás a mi lado pero sí siempre dentro de mis recuerdos y mi corazón.

Fuiste un gran padre para mi, me mimaste desde que nuestras miradas se cruzaron.

Mamá te decía: "No le compres más regalos que la vas a malcriar"; pero tú no lo podías evitar y siempre al llegar de trabajar llegabas con algo para mí.

Me enseñaste muchas cosas, a saltar, a jugar al escondite. ¿Te acuerdas, papá? ¿Cómo era.. one, two, three... dónde está la niña?

No te voy a decir adiós porque mamá me ha dicho que fuiste a buscarme la luna. Yo le dije que está muy lejos, pero ella dice que un día tú me la traerás y yo esperaré hasta que ese día llegue, papá.

Te digo hasta luego y hasta siempre. Y como a ti te gustaba oírme decir: te quiero mucho, Papi.