La llegada de dos aviones de estado brasileños procedentes de China vía Polonia y con destino al país carioca ha activado la vigilancia por coronavirus en el Aeropuerto de Gran Canaria. Estos aviones de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) que han hecho escala técnica en la Isla trasladan a 34 brasileños repatriados desde Wuhan, la zona donde se desató la enfermedad, y estaba previsto que llegasen a su destino en la madrugada de este domingo, informa Efe.

Durante la maniobra de repostaje en Gran Canaria, un miembro de la tripulación descendió del aparato a la pista de aterrizaje portando una mascarilla protectora en la cara, razón por la que el personal en tierra del aeropuerto notificó la situación a Sanidad Exterior. Las aeronaves no podían volver a despegar hasta que la Delegación del Gobierno en Canarias lo autorizara, de acuerdo con las fuentes consultadas por este periódico. Y según fuentes diplomáticas, ya han obtenido dicho permiso para despegar tras cumplirse los trámites pertinentes.

Desde Delegación del Gobierno informan de que los comandantes de los aviones han firmado una declaración asegurando que a bordo no hay nadie con síntomas. "Nadie ha bajado de los aviones, salvo los miembros de la tripulación estrictamente necesarios para la operación vinculada a la escala técnica. Ese proceso está siendo controlado por Sanidad Exterior" explica la Delegación en un comunicado que concluye afirmando que "nadie va a desembarcar" y el avión permanecerá en la Isla el tiempo estrictamente necesario.