El Juzgado de Instrucción número 4 de Las Palmas de Gran Canaria condenó a cuatro meses de prisión y 180 euros de multa, por un delito de atentado y otro leve de lesiones, a un vecino de la capital grancanaria que desobedeció la vigente orden de confinamiento por el coronavirus y llegó a amenazar y golpear al agente que le requería para cumplirla.

En sentencia derivada de juicio rápido de conformidad, el órgano judicial, en funciones de guardia, declara probado que sobre las 22.25 horas del pasado miércoles el acusado se hallaba junto a dos personas más detrás del campo de fútbol del barrio de la Feria de la capital grancanaria.

Dos agentes de la Policía Nacional se acercaron a él, y, detalla el fallo, el acusado comenzó a gritar expresiones del siguiente tenor: "a mi novia no, que está embarazada, como la toques te mato, no la toques que tengo medicación". "Con la clara intención de ignorar el principio de autoridad amén de atentar contra la integridad física ajena", sigue la autoridad judicial, el acusado "intentó dar varios puñetazos" a uno de los policías, "y posteriormente, con idéntico propósito criminal, agarró al agente mencionado por el brazo, golpeándolo dos veces con el codo en el lado derecho de la cabeza".

El acusado confesó los hechos y mostró su conformidad para beneficiarse de una rebaja en la condena. La resolución judicial, que se adjunta, es firme.

Sorprendido

E n la misma jornada del viernes, el mismo Juzgado de guardia resolvió con sentencia firme otro caso de violación de confinamiento, el de un vecino de Santa María de Guía que fue sorprendido deambulando por el barrio capitalino de Vegueta sin justificación alguna y se resistió a deponer su actitud contraria a la orden de confinamiento. Según detalla la sentencia, entre las 8.00 y las 10.00 horas del jueves, el ahora condenado "se dedicó a transitar por las calles de Vegueta, la Avenida Marítima y la calle Juan XXIII de Las Palmas de Gran Canaria".

Expone la resolución judicial de conformidad que cuando fue requerido por los agentes para que abandonar la vía pública y se confinara en su domicilio, "con evidente desprecio al principio de autoridad, el acusado se negó a marcharse del lugar y dijo que no cumplía tal orden, que obedecía órdenes de Dios para salir a la calle y que prefería ser detenido antes que volver a su casa".

En este caso, la condena, atenuada por la conformidad del autor de los hechos, importa una multa de 720 euros.

Por otro lado, en Ingenio, un vecino de unos 55 años fue detenido por la Policía Local por quebrantar por tercera vez el confinamiento y por su desobediencia de la autoridad en Carrizal.. Además, se trataba de la tercera ocasión durante esta semana que los agentes interceptaron al vecino que estaba en la vía pública de forma injustificada.

Hasta ayer, la Policía Local de Ingenio presentó al menos 75 denuncias. Los agentes locales de Agüimes presentaron 27 propuestas de sanción por infracciones a las medidas establecidas por el real decreto del día 14.