El Buque de Acción Marítima (BAM) Tornado, que tiene su base en el Arsenal Militar de Las Palmas de Gran Canaria, se ha convertido en una pieza clave para desmantelar la organización de narcotransportistas más importante de Galicia, que pretendía introducir 4.000 kilos de cocaína tras su paso por aguas próximas a Canarias.

La Policía Nacional y la Agencia Tributaria han asestado un golpe al tráfico de drogas en Galicia, con la detención de 28 personas (15 tripulantes y 13 personas en tierra) y la aprehensión de unos 4.000 kilos de droga. "La operación ha permitido desarticular la organización de narcotransportistas más importantes de Galicia que, formada por experimentados lancheros y conocidos traficantes, se ponían al servicio de las más importantes estructuras de narcotráfico, tanto a nivel nacional como internacional, siendo requeridos, presuntamente, para recoger cocaína en alta mar cuando fuesen requeridos", según la Policía Nacional. La operación sigue abierta, por lo que no se descartan más detenciones.

La droga fue hallada a bordo del Karar, con bandera togolesa, que fue abordado a más de 300 millas de las costas gallegas.

En la actuación contaron con la colaboración de la Armada y su buque Tornado, que opera desde la Base Naval, al embarcar a una decena de funcionarios y agentes de Agencia Tributaria y del Grupo Especial de operaciones (GEO) de la Policía Nacional.

Y, posteriormente, sirvió de escolta del barco de la droga hasta el Puerto de Vigo, donde atracó ayer. El buque, uno de los más modernos desde el punto de vista tecnológico, cuenta con sistemas para una guerra electrónica, un cañón, ametralladoras y embarcaciones neumáticas.

Colaboración internacional

La investigación ha sido coordinada por la Fiscalía Antidroga de Pontevedra y dirigida por el Juzgado de Instrucción número 3 de Vigo, contando con la colaboración de la Armada Española, la Agencia Americana Antidroga (DEA), la National Crimen Agency británica (NCA) y la Policía de Colombia (Diran), sobre todo para localizar al barco nodriza, que cargó la droga a principios de mes y llevaba unos 20 días de travesía, hasta que el fin de semana fue interceptado.

La investigación comenzó hace seis meses sobre un grupo formado por experimentados lancheros y conocidos traficantes, que, presuntamente, se ofrecía a las estructuras de narcotraficantes para recoger cocaína en alta mar. Tenía un gran número de lanchas y motores de gran potencia.