Llevaban siete días de travesía por el Atlántico. Poco antes de las cuatro de las cuatro de la tarde, los 55 migrantes que iban en el cayuco ya veían tierra. Un pesquero alertó de su presencia cuando navegaban a unas seis millas (11 kilómetros) al sur de Gran Canaria. Todos fueron trasladados al muelle de Arguineguín en buen estado de salud. Desde el pasado 14 de marzo, cuando el Gobierno decretó el estado de alarma por la pandemia del coronavirus, han sido rescatadas 895 personas en la ruta del Atlántico.

El aumento en la llegada de migrantes se inició en el segundo semestre del año pasado y ha proseguido durante los primeros cinco meses y medio de este. Así, entre el 1 de enero y ayer han alcanzado las costas del Archipiélago aproximadamente 2.122 personas, según datos publicados por el Ministerio de Interior y recopilados por este periódico. Esta cifra significa un incremento del 504% al registrarse en ese mismo periodo del año pasado la llegada de 351 migrantes.

Esta tendencia se ha mantenido durante la cuarentena provocada por la Covid-19. No obstante, desde el pasado 14 de marzo han sido interceptadas un total de 26 embarcaciones con un total de 895 personas, por las 246 que lo hicieron el año pasado en 17 pateras o cayucos. Esto significa un incremento del 263%.

La última de las embarcaciones fue localizada a las 15.50 horas de ayer cuando el pesquero Cecilia enviaba un aviso al Centro Coordinador de Salvamento Marítimo de Las Palmas de que habían avistado un cayuco con varias decenas de personas en su interior al sur de Gran Canaria y en dirección a Arguineguín. Al mismo tiempo, el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) de la Guardia Civil daba una alerta de un posible eco en la misma localización.

La Salvamar Menkalinan, con base en el muelle de Arguineguín, llegó hasta el cayuco, que se encontraba ya situado a apenas una milla (1,8 kilómetros) de la costa. Los miembros de Salvamento Marítimo comprobaron que todas las personas, varones y de origen subsahariano, se encontraban en perfecto estado de salud y procedieron a trasladarlos hasta las instalaciones portuarias del municipio de Mogán.

El habitual equipo de atención médica de Cruz Roja y el Servicio de Urgencias Canario, con el apoyo de Policía Local, Policía Nacional y Guardia Civil, se encargaron de atender a los migrantes. Ninguno de ellos tuvo que ser remitido a un centro sanitario. Los ocupantes, entre los que se encontraba un grupo de malienses, señalaron que habían salido hacía siete días desde la costa africana. Un total de 25 refirieron ser menores de edad, según apuntaron fuentes de los equipos de emergencia que actuaron en el servicio. Los rescatados fueron trasladados hasta las dependencias de la Jefatura Superior de Policía de Canarias en Las Palmas de Gran Canaria.

Esta es la cuarta embarcación interceptada este mes en el Archipiélago. La primera fue localizadas el día 3 a 40 millas al sureste de Fuerteventura con 50 personas a bordo. Un día después, el pesquero Juan Carlos I dio un aviso de que había avistado un cayuco con 56 migrantes a bordo a cuatro millas al suroeste de la punta de Maspalomas. Al día siguiente, los 28 ocupantes de una patera lograron llegar a la playa aldeana de Tasarte. Todos ellos consiguieron desembarcar por sus propios medios ante la mirada de los testigos.