La gran cantidad de basura y neumáticos que se acumulaba en un descampado de Santa Lucía hizo que los bomberos del Consorcio se tuvieran que emplear durante seis horas para poder apagar el fuego, que dejó sin internet a la localidad de Pozo Izquierdo.

El incendio se inició sobre las cuatro y cuarto de la tarde cuando una gran columna de humo negro se levantaba de una zona de invernaderos entre la autopista GC-1 y la citada localidad costera del sureste de Gran Canaria. Esto hizo que se diera aviso a la torre de control del Aeropuerto de Gran Canaria para que informara a las tripulaciones.

Los bomberos, cuando se presentaron, comprobaron que las llamas se encontraban localizadas en una montaña de basura donde había neumáticos, que ardían sin control. Así, primero controlaron el incendio y después, con la ayuda de maquinaria del Ayuntamiento de Santa Lucía, taparon el fuego con tierra para terminar de apagarlo.

Durante la intervención, que finalizó en torno a las diez y media de la noche, el cuerpo de extinción de incendios utilizó unos 75.000 litros de agua, según indicaron fuentes que actuaron en el lugar de los hechos.