La rachas de viento ocasionaron ayer más de un susto en Telde. Los policías locales y bomberos tuvieron que intervenir en distintas ocasiones por el desprendimiento de piezas en distintos inmuebles. Entre ellos, en una nave en la costa, lo que obligó a asegurar la estructura y acotar la zona. El mismo problema se repitió en algunas instalaciones públicas municipales.

En el aeropuerto de Gran Canaria se registraron rachas de hasta 76 kilómetros por hora. Pero no fue el máximo en la Isla. La Agencia de Meteorología certificó hasta 100 kilómetros por hora en La Aldea, y 95 en Agaete.