Doce personas han sido detenidas en las últimas horas en el transcurso de una importante operación contra el tráfico de drogas. La redada ha sido desarrollada conjuntamente por el Servicio de Vigilancia Aduanera, la Guardia Civil y la Policía Nacional, que llevaban más de medio año pisándole los talones a los sospechosos. El operativo estalló el miércoles por la mañana tras el abordaje del velero 'Nergha', en el que se localizaron unos 1.200 kilos de cocaína, según fuentes conocedoras de la investigación. La embarcación fue capturada navegando a unas 1.000 millas al oeste de Canarias, estando previsto que atraque en Las Palmas de Gran Canaria.

Miembros de los tres cuerpos accedieron a ella desde el buque de acción marítima Rayo, un patrullero de la Armada con base en el Arsenal de Las Palmas de Gran Canaria, y se procedió a la detención de sus cinco tripulantes. De estos, tres son españoles, uno portugués y el quinto brasileño. Entre los cinco arrestados hay una mujer, vecina de Caldas de Reis, algo que poco frecuente en las operaciones en alta mar.

La embarcación está siendo ahora escoltada hasta el puerto canario de Las Palmas, a donde se espera que llegue la semana próxima. Será ahí donde se proceda al pesaje oficial de la cocaína.

La fase de la operación en tierra arrancó sobre las 15 horas del jueves, momento en el que empezaron los siete registros de domicilios autorizados por el Juzgado Central de Instrucción 4 de la Audiencia Nacional, coordinador último de la investigación.

El dispositivo se desplegó en Pontevedra, y se hizo con el apoyo de helicópteros y perros especializados en la detección de estupefacientes. Y fueron detenidas otras siete personas. Si bien no han trascendido sus identidades, la mayoría es de la localidad de Arousa y que ninguno de ellos es un histórico narcotraficante. Eso sí, presuntamente integran un grupo de 'lancheros' que ya habría introducido más cocaína a bordo de veleros.

Lo que también parece confirmar esta operación es que los clanes del narcotráfico vuelven a confiar en la vía marítima para aproximar la droga a Galicia.

El velero, matriculado en Vigo, salió del puerto de Cobres (Pontevedra) el 16 de junio de 2020, y tras paradas en Cascais (Portugal) y Cádiz, puso rumbo al sudoeste, hasta alcanzar una posición a unas 600 millas al oeste de Cabo Verde, según Efe. En ese punto recibió el cargamento de droga, que había partido de algún punto por determinar de la costa de Sudamérica. Desde esa posición, comenzó la navegación hacia el norte, hasta el punto en el que ha sido finalmente aprehendido.