La Policía Nacional detuvo el miércoles en Santa Cruz de La Palma a un hombre de nacionalidad colombiana buscado por la Justicia del país americano por el asesinato de su ex pareja. Su localización es fruto del trabajo de la sección de fugitivos del cuerpo, que en los últimos años ha sido artífice también del hallazgo de destacados prófugos como Carlos García Juliá, coautor de la matanza de Atocha en 1977, o Emilio Lozoya Austin, ex director de la petrolera Pemex que era reclamado en México por corrupción y crimen organizado.
La detención de la capital palmera tuvo su origen en una reclamación de las autoridades colombianas por homicidio doloso. En 2019 había disparado y asesinado a su expareja, que viajaba a bordo de una guagua. Su intención, según indica la Policía Nacional en un comunicado, era conseguir la custodia de la hija que tenían en común.
La sección de fugitivos lidera el número de detenciones de prófugos de la Justicia en Europa, con un total de 486 en 2019. La de La Palma es la cuarta de los últimos días tras las llevadas a cabo en Barcelona, Alicante, Madrid y Cádiz.
Una de ellas, desarrollada el pasado 26 de agosto, se saldó con la detención en Barcelona de un ciudadano dominicano buscado por las autoridades brasileñas. Al arrestado le constaba en vigor una notificación de Interpol por apuñalar en repetidas ocasiones a la pareja de su ex novia en 2019 en Porto Alegre (Brasil).
Estafas a modelos
La segunda operación se llevó a cabo en Alicante dos días después. En esta ocasión fueron detenidos dos fugitivos buscados por las autoridades de Reino Unido por varios delitos de fraude económico y blanqueo de capitales. Los arrestados habían creado una falsa agencia de modelos en Reino Unido y, durante ocho años, llegaron a engañar a unas 160 personas a las que reclutaban a través de las redes sociales para realizar falsos books de modelo. Los dos detenidos, de origen británico, lograron defraudar cerca de 10 millones de libras.
Ese mismo día también era detenido en Madrid un ciudadano pakistaní reclamado por las autoridades de su país de origen. El arrestado también tenía en vigor una notificación roja de Interpol por su autoría en el asesinato de su sobrino cometido en Pakistán en el mes de marzo de 2019, advirtiendo que se trataba de una persona probablemente armada y con alto riesgo de fuga.
