La Guardia Civil y la Policía Local de Teguise detuvieron ayer a un total de 25 inmigrantes, de los que cinco son menores de edad, tras arribar en la madrugada del lunes a una de las playas del pueblo de Caleta de Sebo en La Graciosa. Ninguno de los inmigrantes, que son de origen marroquí, precisó atención sanitaria al llegar en buen estado de salud.

"Sobre las 12 y media de la noche varios vecinos del pueblo empezaron a escuchar ruidos por las calles hasta que vieron a un grupo de personas corriendo de un lado para otro". La concejala delegada del Ayuntamiento de Teguise para La Graciosa, Alicia Páez, relata cómo se percataron de la llegada de los inmigrantes tras dejar la patera de unos cinco metros en la playa situada junto al muelle.

Los inmigrantes, que pudieron cambiarse incluso de ropa tras arribar a La Graciosa, pensaban que habían alcanzado el litoral de Lanzarote. Sin embargo, a medida que amanecía el día se percataron que no habían logrado su objetivo. "Algunos hablaban bien español e incluso nos decían cuándo iban a ser deportados a Marruecos", señala Alicia Páez.

Efectivos de la Guardia Civil se trasladaron desde Lanzarote poco después de la una de la madrugada en un watertaxi para iniciar la búsqueda de los sin papeles, junto a los policías locales de La Graciosa. Un dispositivo de búsqueda que permitió la detención a cuentagotas de hasta 25 personas.

Los primeros en ser detenidos fueron los cinco menores, con edades que podrían oscilar entre los 13 y 17 años. A este grupo de jóvenes se les trasladó a primera hora hasta Lanzarote para ser atendidos por los responsables de menores no acompañados del Cabildo conejero.

Fuentes de la Delegación del Gobierno en Canarias han confirmado que se mantiene un dispositivo de seguridad en la isla, en previsión de que pudiera haber algún otro ocupante de la patera escondido; no se prevé que en la patera viajaran más personas que las ya detenidas.