Presuntos autores de un delito de homicidio. La Guardia Civil tiene previsto poner durante la mañana de hoy a disposición del juzgado de Arucas a la mujer, el hijastro y el cuñado de José Delgado, el taxista de Las Palmas de Gran Canaria que desapareció el pasado mes de diciembre en extrañas circunstancias. La investigación llevada a cabo por la Policía Judicial determina que pudieron acabar con la vida del profesional, aunque durante los rastreos llevados a cabo a lo largo del día de ayer no se hallaron indicios de su paradero.
El operativo desplegado por el Instituto Armado, en el que participa el Equipo de Análisis de Comportamiento Delictivo procedente de Madrid, parece tener atado que los tres arrestado están involucrados en el posible homicidio de Delgado, según indicaron fuentes cercanas a la investigación. Asimismo, se les podría atribuir un posible delito de obstrucción a la justicia al esconder información importante sobre el paradero del taxista durante estos meses.
Uno de los acontecimientos más importantes desde que el pasado 9 de diciembre José Delgado fuera visto por última vez fue el hallazgo de su teléfono móvil. Se produjo durante el confinamiento cuando, según fuentes consultadas, su mujer Rosi estaba limpiando su vivienda. En un momento, al mover un mueble, el aparato cayó al suelo y se percató de su presencia, según declaró a la Policía Judicial al proceder a su entrega. En los casos de desaparición, la señal de los celulares aporta a los agentes una información vital para conocer los últimos movimientos de las personas buscadas. En este caso, en un primer momento no se pudo obtener su localización al estar apagado cuando se produjo la denuncia por desaparición.
La ardua investigación, dirigida por el juzgado de instrucción número 3 de Arucas, llevó el pasado miércoles a la detención de la mujer del desaparecido, al hijo de ésta y a un hermano suyo. Ese mismo día se produjo el registro de tres viviendas familiares, una en San José del Álamo, otra en La Guanchía y la tercera en El Palmar, sin que hasta el momento haya trascendido que se hayan conseguido indicios sobre el paradero de José Delgado.
A estos registros se unió ayer el rastreo de la finca que está situada anexa a la casa terrera de la familia de la mujer, donde se sospechaba que podía estar enterrado el cuerpo. El resultado, después de cuatro horas, fue el mismo de siempre. Sin rastro del taxista. Asimismo, el Giors peinó una ladera de La Guanchía, muy próxima a la vivienda del desaparecido, y durante la tarde el barranco de Teror, en el tramo cercano al nuevo puente, ante la posibilidad de que el cuerpo hubiese sido arrojado en este punto. Mismo resultado.
Los investigadores tiene previsto que los tres arrestados pasen hoy a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Arucas, quien poco después de la desaparición decretó el secreto de las diligencias, sin agotar las 72 horas máxima de las que disponen para realizar las pesquisas pertinentes desde la detención.
La familia de José Delgado seguía ayer con nervios el dispositivo de búsqueda del taxista. “Estamos desesperados”, indicó uno de los allegados, que apostilló: “Queremos saber donde está, que lo encuentren para que podamos despedirnos de él; ya después se verá qué fue lo que ocurrió”.
