Hallan unos 1.200 kilos droga en el interior del carguero repleto de millo que está atracado desde la semana pasada en el muelle de Santa Catalina, en Las Palmas de Gran Canaria. El operativo de descarga y carga del ‘Unispirit’ se ha prolongado cinco días. Sin embargo, lo curioso es que este mismo buque, que solo tenía previsto fondear un día en aguas de la capital, fue interceptado a comienzos de este mes en un puerto de Brasil con otros 1.524 kilos de cocaína en sus bodegas, por lo que los investigadores tratan de aclarar si la inspección en tierra allí solo localizó parte de la carga, se volvió a llenar de sustancias ilegales antes de su partida o en medio de la travesía, o bien, existe una situación algo más turbia en su origen.

Cerca de 8.000 sacos, cada una de las cuales pesa cerca de una tonelada. En total, las bodegas guardaban en distintas alturas y bodegas unos 8.000 kilos de millo. Distintos cuerpos policiales con ayuda de empresas privadas del Puerto han trabajado para remover el barco de carga general para localizar la droga, que se encontraba dispersa en el interior. El operativo de búsqueda se inició el sábado, y no concluyó hasta la tarde de ayer, con el descubrimiento de unos 1.200 kilos de droga, según distintas fuentes, a la espera que se den los datos oficiales, ya que la investigación sigue en macha.

Como ya publicó este periódico el domingo, el barco fondeó poco antes de las 10 de la mañana en aguas de La Luz el viernes, entrando al tradicional muelle de cruceros poco después de las tres de la tarde. Y el sábado se procedía a la descarga de las sacas de millo, que ha servido como camuflaje para ocultar sustancias prohibidas.

El barco llevaba una tripulación formada por 12 personas, con su capitán de origen ruso.

Las maniobras se vieron dificultadas por el enorme volumen de la carga, ya que al estar situado en la punta del muelle Santa Catalina ocupaba toda la zona, sobre la que se debe mantener también una estrecha vigilancia. Para ello se estaba usando la propia grúa del buque, de 132 de eslora (longitud) y 16 de manga (ancho), además de equipo portuario.

La actuación antidrogas contó con un amplio operativo en el que colaboraron la Guardia Civil, Policía Nacional y Vigilancia Aduanera, además de empresas portuarias para ejecutar la descarga.

El carguero zarpó del puerto de Sao Sebastiao, en Brasil. Y llevaba según algunas fuentes 12 días y 15 horas días de navegación hasta llegar a la capital grancanaria.

Lo curioso del caso del ‘Unispirit’ es que a principios de este mes, y durante una inspección rutinaria, las autoridades brasileñas localizaron en sus bodegas un alijo de droga entre la carga de millo. Llevaba 1.524 kilos de cocaína. Su destino era inicialmente Cádiz.

De ahí que se busque una explicación a esta situación, que tiene descolocados a los propios cuerpos de seguridad grancanarios, aunque es posible que existiera un seguimiento del barco cuando venía a la Isla. No hay que olvidar que había solicitado permiso para fondear durante un día. De ahí que se manejen distintas hipótesis sobre esta nueva droga intervenida. Por un lado, que la inspección en Brasil solo descubriera parte de la cocaína. Por otro lado, que en el propio muelle del país americano o en ruta volviera a cargar nueva droga. O bien, que existan turbios intereses en el muelle brasileño sobre este barco y su carga.

“Los paquetes de cocaína estaban escondidos en medio de la carga de maíz, por lo que fue necesario retirar todo el grano de la bodega para extraer la droga”, según informaron las autoridades en Brasil sobre el ‘Unispirit, que apuntaban que La Aduana ya se había incautado en agosto pasado en el vecino puerto de Santos, en Brasil, otro cargamento de 192 kilos de cocaína que se dirigía hacia Las Palmas entre carne congelada.

Marcas y perros adiestrados

El ‘Unispirit’ es un buque de carga general con bandera de Antigua & Barbuda. Se construyó en 2006, con algunos cambios de nombre durante estos años. Y ha pasado en cuatro ocasiones en los últimos años por La Luz: dos en 2018 y las mismas veces el año pasado, por lo que no es un puerto habitual en sus rutas de navegación. En este caso solo tenía previsto fondear un día, y su destino final debía ser Cádiz. Sin embargo, en estos días ha sido sometido a una completa revisión para localizar la droga, usándose para ello maquinaria especializada y perros adiestrados para marcar las sacas que ocultaban las sustancias ilegales. | J. B.