A las dos menos diez de la tarde de ayer, grandes llamaradas y una columna de humo surgían del interior de un invernadero de plataneras situado en las proximidades del casco urbano de Arucas, que levantó la alarma en el municipio norteño. Los bomberos del Consorcio tuvieron que actuar durante más de tres horas y utilizar más de 20.000 litros de agua para atajar las llamas, que destrozaron por completo una plantación de plataneras de una hectárea y media.

El Centro Coordinador de Emergencias y Salvamento (Cecoes)112 movilizó a la Policía Local, Guardia Civil y los bomberos ante las llamadas que advertían de un importante incendio en una parcela situada en las proximidades de un supermercado y una gasolinera, entre Arucas y el barrio de La Goleta. La altura de las llamas, de varios metros, hacía preveer la virulencia del fuego que había en el interior del invernadero.

Cuando los tres bomberos que ayer cubrían el turno en el parque de Arucas, cuando este está integrado por al menos seis trabajadores, llegaron al lugar solicitaron de inmediato refuerzos a sus compañeros de las bases de Gáldar y Arinaga ante la magnitud del incendio. Así, mientras tanto, comenzaron a atacar las llamas, que habían generado a su vez otros dos conatos en el exterior de las instalaciones agrícolas que afectaban a plataneras situadas cerca de varios inmuebles.

Incendio en Arucas

Las labores de extinción se complicaron debido a que el fuego avanzó en vertical hasta afectar el techo de plástico de los invernaderos. Fuentes que intervinieron en las labores para apagar las llamas señalaron que las plataneras en sí no ardían, sino que los restos de las podas de estas que luego se dejan en el suelo estaban secas y era lo que hacía avanzar el fuego. 

Los trabajos se alargaron durante más de cuatro horas hasta que finalmente, sobre las seis de la tarde, se daba por extinguido después de que los bomberos utilizaran más de 20.000 litros para hacer frente al incendio que levantó una intensa humareda visible en las medianías del municipio del norte de Gran Canaria.

Por su parte, la Guardia Civil también participó en el servicio y será la encargada de investigar lo ocurrido para determinar si el fuego fue provocado, se inició por autocombustión por algún elemento químico-agrícola o si se produjo por algún despiste con un objeto candente.