66 tortugas, nueve iguanas, seis cocodrilos, cinco lemures, cuatro boas esperaldas, tres loros, dos serpientes, dos monstruos de gila y un varano del Nilo. El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil detuvo el pasado mes de noviembre a dos personas en Gáldar y Telde como presunto autores de los delitos contra la fauna y flora, falsedad documental, contrabando de especies protegidas y tenencia ilícita de armas. Parte de estos 98 animales tienen relación con el antiguo zoológico Reptilandia Park, situado en el municipio del noroeste de la Isla, que cerró sus puertas en 2005.

La Comandancia de Las Palmas informó ayer en un comunicado de que la investigación comenzó a raíz de otra operación llevada a cabo por el Seprona en varios puntos de la geografía nacional. De esta se derivaron varias líneas de investigación sobre irregularidades en el comercio de especies animales protegidas por el Convenio Internacional sobre Comercio de Flora y Fauna (Cites) por parte de dos residentes en Gran Canaria.

Los agentes realizaron el pasado 20 de octubre dos registros en fincas adaptadas para la cría de especies exóticas en Gáldar y Telde y localizaron 98 animales protegidos por el citado convenio de diversas especies. Así, los animales confiscados fueron: cinco lemures de cola anillada, cuatro tortugas leopardo; una tortuga mora, seis torturas carbonaria, catorce tortugas radiata, siete tortugas horsfieldii, catorce tortugas elegance, cuatro tortugas tornieri, una tortuga japónica, una tortuga de las galápagos, cuatro boas esperalda, tres iguanas c. cornutta, una iguana c. lewisi, un varano del Nilo, un cocodrilo del Nilo albino, dos cocodrilos cubanos, tres cocodrilos del Nilo, dos tortugas sulcatas, doce tortugas gigantes aldabra, dos monstruos de Gila, cuatro iguanas ctenosaura similis, una iguana verde, dos serpientes lampropeltis californiana, dos loros amazona aestiva y un loro amazona cubana. Otras fuentes consultadas apuntaron a que parte de estos animales están vinculados al Reptilandia Park.

El Instituto Armado indicó que el delito de contrabando consistió en el tráfico de las especies que se encuentran dentro del convenio Cites ya que, además, los detenidos carecían de los documentos para su comercio legal, al margen del control legal de especies.

Además, los componentes del Seprona, que contaron con el apoyo de la Dirección Territorial de Comercio Exterior de Las Palmas, localizaron en el registro realizado en Telde un subfusil de guerra de 9 milímetros Parabellum, una ballesta y una carabina de aire comprimido, sin que los arrestados presentaran ningún tipo de documentación para su legal uso.

Los animales fueron realojados en un zoológico autorizado por la administración de Gran Canaria, señala el comunicado.