La Guardia Civil ha reiniciado esta mañana la búsqueda de José Delgado, el taxista desaparecido en diciembre de 2019 después de ser visto por última vez en su vivienda en el municipio de Teror. Perros especializados en la detección de restos humanos son los encargados de los rastreos, que se están desarrollando en una ladera próxima a la casa familiar, situada en el barrio de Guanchía. Su mujer, su hijastro, un cuñado y su suegra continúan como investigados como presuntos autores de su muerte

Este es un nuevo intento por parte del Instituto Armado para dar con el cuerpo del profesional del taxi. Fuentes familiares han apuntado que existen indicios de la presencia de restos de Delgado en esta zona del municipio, que ya ha sido peinada durante anteriores rastreos. En esta ocasión, se ha desplazado hasta el lugar un grupo de canes de la propia Guardia Civil adiestrados para la búsqueda de personas.

José Delgado desapareció entre el 8 y el 9 de diciembre de 2019. La reconstrucción de los hechos apuntan a que fue un compañero suyo el último no familiar que lo vio por última vez. Fue la noche del domingo, 8 de diciembre, cuando lo trasladó desde el barrio capitalino de Casablanca I, donde había pasado toda la jornada dominical junto a su madre, hasta su casa en Guanchía. Aquella noche su móvil dejó de emitir señal, según su mujer Rosa María Y. O., porque había perdido el móvil. Su compañera sentimental aseguró que José Delgado se fue de casa por su propio pie al día siguiente, lunes 9 de diciembre, después de comer y cuando ella se quedó dormida viendo la tele.

En septiembre, la Guardia Civil desarrolló una operación en la que procedió a la detención de la esposa de José Delgado, Rosa María Y. O., su hijastro Kilian R. S. N., su cuñado Eduardo J. S. N., y su suegra Expedita N. O. O. como presuntos autores de un delito de homicidio. El juez los puso posteriormente en libertad con cargos y precisó que los propios familiares se “autoincriminan” debido a la “plaga” de contradicciones durante sus declaraciones.