La Federación de Servicios a la Ciudadanía de Comisiones Obreras Canarias (FSC-CCOO) denunció este martes la reciente agresión a un médico por parte de un recluso en el centro penitenciario de Las Palmas II. Según el sindicato, el interno golpeó a un médico por no darle la medicación psiquiátrica que exigía.

A juicio del sindicato, "hechos como este ponen de relieve la falta de protocolos así como la indefensión de muchos profesionales que tienen que tratar, apenas sin recursos, con muchos internos que sufren problemas mentales". El médico ha necesitado asistencia sanitaria y se encuentra de baja médica. 

FSC-CCOO señala que en los centros penitenciarios "es habitual la tensión entre los médicos que pautan los tratamientos farmacológicos y los internos, muchos de los cuales demandan mayor cantidad de pastillas, ya sea para el consumo propio o para hacer negocio con ellas". Sin embargo, apuntan, "Instituciones Penitenciarias carece de un protocolo eficaz para prevenir y reducir las agresiones que sufre el personal penitenciario. Sólo las agresiones físicas graves e intencionadas se castigan en la vía penal, pero los insultos, las amenazas y la agresión física no dolosa están excluidas de cualquier acción preventiva y judicial". 

Otro problema, concluye FSC-CCOO, es que "el personal sanitario que trabaja en las prisiones no tiene la consideración de agente de la autoridad, al contrario de lo que sucede con el resto de las profesionales del Sistema Nacional de Salud, por lo que no tienen la misma protección en la vía penal ni administrativa".