Por una oreja les entra y por otra les sale. Decenas de personas han hecho caso omiso esta tarde en Adeje a las restricciones para celebrar cualquier tipo de fiesta pública o privada y con música que invite a cantar o bailar durante los días señalados por las fiestas del Carnaval. De hecho, este tipo de encuentros estaban prohibidos desde que se adoptaron restricciones para evitar la expansión del coronavirus en Canarias. Sin embargo, hay todavía irresponsables que piensan que la transmisión del virus es un juego; que las víctimas mortales a causa de la Covid-19 no importan y que el que la economía esté gripada provocando una profunda crisis social nunca antes vista es un asunto que no parece ir con ellos.

Esta tarde, en Adeje los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado tuvieron que desalojar una fiesta en un chiringuito en la Playa de la Enramada, en Adeje donde la música sonaba a todo volumen, donde había gente bailando y cantando y donde muchos ni guardaban la distancia de seguridad o ni siquiera llevaban mascarilla.

Los agentes del municipio sureño aseguran que “no dan abasto” y que en estos últimos días “han vivido una auténtica locura” por la cantidad de eventos que han tenido que desalojar en locales de ocio.

A lo largo de estos dos últimos días han tenido que intervenir en la Playa del Duque donde se había organizado un botellón y pudieron abortar en la Playa Diego Hernández el intento de otra reunión de jóvenes con bebidas alcohólicas.