Nueva redada contra el negocio de drogas en Vecindario. La Guardia Civil irrumpió ayer en una vivienda del municipio de Santa Lucía, en Gran Canaria, que sirve de plataforma para este tipo de actividades ilícitas, con la detención de varias personas. Uno de los perros de los implicados se abalanzó contra uno de los agentes del dispositivo policial, que tuvo que ser atendido en un centro médico.
La intervención policial se realizó en la calle Insular de Vecindario, en las inmediaciones del centro comercial. Y obligó a una amplia presencia de agentes, ante las resistencia que se encontraron en torno a esta operación antidrogas.
Un testigo presencial relató ayer a este periódico que un familiar de uno de los detenidos llegó a manifestar en la zona que no iban a encontrar mucha droga, por lo que estaba reconociendo implícitamente la actividad, si bien en ese momento no ocultaban muchas sustancias en ese inmueble.
El amplio despliegue, que incluyó perros adiestrados en la búsqueda de sustancias estupefacientes, fue muy seguido por los vecinos de los alrededores. Hay que tener en cuenta que la operación se alargó mucho tiempo, debido precisamente a las dificultades que se encontraron hasta que abandonaron el lugar.
De momento se desconoce el número de detenidos, ya que el dispositivo puede abrir nuevos cauces de investigación paralelos para tratar de acabar con este negocio en la localidad del Sureste grancanario. Tampoco se conoce el volumen y tipo de sustancias que se han incautado en esta ocasión.
La Guardia Civil ha venido realizando en Vecindario una gran batida en un intento por frenar el tráfico de drogas, que ha alcanzado niveles preocupantes. Hace dos meses detuvo a un clan familiar dedicado al negocio de la droga en el barrio de Los Llanos, también en Vecindario, que tenía gracias a su gran ‘supermercado’ de la distribución hasta 12 vehículos, pese a carecer de trabajos legalmente reconocidos. Pasaron a disposición judicial cuatro integrantes (dos hombres y dos mujeres), de entre 34 y 57 años. En la operación se les incautó 3,4 kilos de hachís, 1.776 dosis de crack, 42 gramos de heroína, 4,7 gramos de cocaína, y 3.671 euros en metálico.
