Sucedió el sábado el 3 de abril a las diez y media de la noche. Una menor de 16 años bailaba sobre un banco del parque del Oeste, en Madrid. Estaba con tres amigos. Hasta allí se acercaron 17 jóvenes que la rodearon y, formando un corro, empezaron a "manosearla" por todo el cuerpo, especialmente el pecho y las nalgas. Algunos la insultaban mientras lo hacían. Otro aprovechó para robarle el teléfono móvil que llevaba en su bolso.

Una patrulla se personó en el lugar y detuvo, allí mismo, a 13 jóvenes del grupo de los agresores. Todos han quedado en libertad después de que la víctima no pudiera identificar a ninguno de los detenidos como sus atacantes, según ha podido saber EL PERIÓDICO de fuentes del caso.

Caso abierto

Los detenidos y ahora puestos en libertad siguen siendo investigados por un posible delito de abusos sexuales. Tienen entre 14 y 21 años y no conocían a la víctima. Cuatro de ellos son menores de edad, como la víctima. Ocho de los investigados son marroquíes, tres son españoles, uno dominicano y otro venezolano. La investigación del suceso, que sigue abierta, corre a cargo de la UFAM (Unidad de Familia y Atención al Menor) de la Policía Nacional.

Fueron dos amigos de la chica los que consiguieron alejarla de sus agresores durante los presuntos abusos y llamar por teléfono a la policía. Cuando los agentes llegaron al parque, el grupo seguía allí. Los acompañantes de la víctima han declarado y han aportado información a la policía sobre los jóvenes que estarían implicados en los abusos, datos que, dada la situación, la chica podría no recordar con nitidez porque, según fuentes policiales, durante la agresión "se asustó y se quedó bloqueada".