Un turista de nacionalidad francesa perdió la vida y su mujer resultó herida en la cabeza, como consecuencia de un choque frontal entre dos motos de agua cerca del puerto de Pasito Blanco, en el municipio grancanario de San Bartolomé de Tirajana, informa el Centro Coordinador de Emergencias (Cecoes) 112 del Gobierno de Canarias. A su vez, el hijo tuvo que ser atendido por una crisis de ansiedad tras el accidente, mientras se baraja si se le investiga por imprudencia temeraria.

El Cecoes recibió sobre las cuatro de la tarde una alerta en la que se solicitaba asistencia sanitaria para varias personas en el muelle de Pasito Blanco, después de producirse una colisión entre dos motos acuáticas.

Al parecer, el matrimonio iba en una de las embarcaciones y en la otra iba su hijo adolescente, disfrutando del mar, de una jornada de ocio y de la velocidad, junto a un monitor en otra barca, en altar mar y a la altura de Montaña Arena. En un momento dado, ambas chocaron frontalmente, saliendo despedido el padre al agua, y siendo golpeado por la moto que pilotaba su hijo, adolescente. El turista, de 43 años, llegó hasta la orilla, pero fue allí donde se desplomó por las graves lesiones que sufrió en la cabeza.

Un médico del SUC que se encontraba en el lugar solo pudo diagnosticar su fallecimiento, debido al profundo corte que tenía.

El equipo que fue en una ambulancia atendió también a su mujer, de 47, y también de origen francés que había sufrido un traumatismo craneal de carácter moderado, presentando una herida en la frente. Tras ser asistida, fue trasladada en una ambulancia al centro de salud de Maspalomas, donde quedó bajo observación médica. Posteriormente fue evacuado a un centro médico privado de la costa turística para realizarle pruebas en la cabeza, y evaluar la gravedad de los daños que sufrió.

A su vez, el joven de 17 años , y de la misma procedencia, sufrió un ataque de ansiedad de carácter leve, siendo trasladado al mismo centro asistencial para atenderlo.

La policía judicial valora ahora si investigar al adolescente por una imprudencia temeraria, debido a su comportamiento con la moto, sin tener en cuenta el riesgo. Además, el trabajo policial llega a la empresa que se lo alquiló.