Este martes 31 de agosto, la Policía Local de Garachico (Tenerife) tuvo que intervenir para obligar a bajar de más de 15 metros de altura a dos individuos, de nacionalidad española, que tuvieron la ocurrencia de escalar en cholas una de las torretas de iluminación del campo de fútbol para sentarse a comer en la cesta acondicionada para sustituir o reparar los focos.
El alcalde, José Heriberto González (CC), compartió a través de la red social Facebook las fotografías de esta imprudencia y lanzaba una pregunta retórica: "¿Ustedes se creen que esto es normal?". Hoy comentó a EL DÍA que aún no sale de su asombro: "Estas personas arriesgaron la vida subiendo por una torreta que no tiene escalera, en cholas, agarrándose a la estructura para luego sentarse arriba a comer algo. Es increíble. Estamos viendo cosas muy raras últimamente. Es un auténtico disparate".
Tras aclarar que no eran turistas extranjeros, González añadió que tampoco eran vecinos de Garachico: "a nadie de aquí se le ocurriría hacer algo semejante". Tras la sorpresa inicial, agentes de la Policía Local acudieron al campo, ahora convertido en un aparcamiento público, y obligaron a los dos imprudentes a bajarse de la torreta.
