El cultivo de marihuana se extiende por los núcleos rurales de San Mateo. La Guardia Civil desmantela una tercera plantación en la Vega en apenas cuatro meses y en los que se han destruido 1.103 plantas en total, con cinco detenidos. A la última actuación ejecutada la semana pasada se suma el arresto de seis personas con otra finca de cannabis en el barrio de Cardones de Arucas, en el que los agentes hallaron hachís y cocaína.
La Guardia Civil aprehendía en mayo 739 plantas de marihuana en una vivienda de La Lechuza, deteniendo a los dos ocupantes, de 27 y 40 años.
En una segunda actuación a finales de agosto, los funcionarios echaban el guante a dos hombres de 75 y 58 años por cultivar 320 plantas de marihuana en una finca agrícola, que se entremezclaban con matos de millo y frutales, dentro de una vivienda alquilada en La Lechucilla.
Una tercera redada permite poner coto ahora a otra explotación ilegal. En este caso, el 14 de septiembre la Guardia Civil detuvo a un varón de 52 años por el cultivo y elaboración de drogas, hallándose una plantación de 44 plantas de marihuana en un alpendre de La Higuera en desuso, que antiguamente se utilizaba para guardar ganado, según la Guardia Civil, que habla de un nuevo operativo «para la prevención del cultivo de droga en las zonas rurales».
En total, en apenas cuatro meses se han descubierto tres cultivos de marihuana en casas rurales, con cinco detenidos y se han destruido sus 1.103 plantas de marihuana en este municipio.
En una intervención paralela, la Guardia Civil detuvo a seis personas de entre 21 y 39 años por su participación en un delito de cultivo y tráfico de drogas. En este caso, en el barrio de Cardones, en Arucas, contando para ello con información previa de la Policía Local del municipio norteño.
Durante la investigación, los agentes pudieron observar el 14 de septiembre que se estaba produciendo la recogida de plantas de Cannabis Sativa, y su manipulación en la zona exterior de la vivienda por varias personas, para la obtención de los correspondientes cogollos. Los agentes llevaron a cabo «una rápida actuación de la Unidad» que permitió la detención de seis personas.
Los funcionarios localizaron en la inspección diversas sustancias estupefacientes «que justificarían que en la vivienda se estaría produciendo la venta de droga e incautándose unos 41 kilos de marihuana (de los cuales unos 10 kilos correspondían a cogollos de marihuana), 155 gramos de polen de hachís, 30 gramos de cocaína, 12 gramos de hachís, diverso material para la elaboración y venta de drogas, seis teléfonos móviles, libretas con anotaciones sobre las ventas de droga realizadas y unos 2.700 euros en efectivo».
En el citado registro se incautó también un dispositivo con sistema eléctrico para poder transformar la marihuana recolectada en polen de hachís, y que, una vez obtenido, era empaquetado en forma de tabletas para su posterior venta.
