La brutal muerte el pasado jueves de un cicloturista en el sur de Francia, de origen español y nacido en 1993, está siendo investigada como asesinato y ya fue comunicada a su familia, informaron este domingo fuentes consulares.

El joven, originario de las Islas Canarias, fue encontrado el pasado jueves 7 de octubre por un transeúnte cuando todavía estaba con vida cerca de un camino de tierra de la pequeña localidad de Soyons, en el departamento de Ardeche (el sureste de Francia), en las orillas del río Ródano.

El cicloturista, gravemente herido, acabó por fallecer en el hospital de la ciudad de Valence por las cerca de una treintena de heridas, la mayoría en la cabeza.

Si en un primer momento se manejó la hipótesis de un accidente fortuito, las autoridades se decantaron más por un posible asesinato debido a la naturaleza de las heridas, probablemente producidas por la contusión con un objeto contundente. El fiscal de la República de Privas confirmó la apertura de una investigación por asesinato.

La policía judicial de Valence lleva a cabo las pesquisas de este suceso, que ha conmocionado por la brutal manera en la que sucedió y por tratarse de un paraje normalmente muy tranquilo, en plena naturaleza.