Magistrados de la Sección V de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife condenaron "in voce" en la mañana de este miércoles a cinco años de prisión a un hombre, residente en Adeje y de nacionalidad italiana, por un delito de corrupción de menores, ya que descargó y compartió decenas de archivos de pedofilia en una aplicación de mensajería instantánea.

El acusado, así como su abogada, admitió los hechos y estuvo conforme con la calificación planteada por la Fiscalía, representada por el fiscal Alejandro Salinas. Su aceptación de la acusación supuso que la pena de cárcel se le redujera en tres años frente a lo que inicialmente pedía el Ministerio Público. Además de los cinco años de privación de libertad, el ciudadano transalpino ha sido condenado a ocho años de inhabilitación para trabajar con menores de edad y, tras salir del centro penitenciario, a diez años de libertad vigilada.

La acción delictiva fue detectada, en un primer momento, por una ong de Estados Unidos especializada en descubrir estas realidades, quien informó a la Brigada Central de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional en Madrid. Los datos fueron remitidos al Grupo de Delitos Tecnológicos de Santa Cruz de Tenerife. Con las direcciones de IP de los dispositivos desde los que se compartieron las imágenes de pedofilia, los agentes consiguieron localizar e identificar al ahora condenado. Se trata de A.M., un italiano asentado en Adeje.

Un investigador de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Santa Cruz de Tenerife explicó que en una entrada y registro se le intervinieron al implicado dos teléfonos móviles y un ordenador portátil. Al analizar dichos efectos, los policías nacionales detectaron mensajes con intercambio de archivos con abusos y agresiones sexuales a menores de edad.

El oficial explicó que los intercambios de imágenes se realizaban a través de una aplicación denominada "kick", con un funcionamiento similar a whatsapp, donde los usuarios ponían enlaces o direcciones de url, que remitían a páginas de almacenamiento de imágenes. Además de compartir fotos o vídeos, el ahora condenado también conversó con otros usuarios a través de dicha aplicación.

'Little kids'

A.M. formaba parte de un chat en el que una de las prioridades era compartir imágenes de abusos o agresiones sexuales a niñas de corta edad y la denominación común de esas víctimas era 'little kids' (pequeñas chicas, en inglés). Otra de las características de dicho grupo era el "alto grado de violencia sexual" ejercida sobre las menores que aparecían en las imágenes, según confirmó el oficial de la Policía Nacional que declaró en el juicio.

El administrador del citado grupo dejaba las cosas claras a los integrantes: o subían imágenes de pedofilia o los expulsaba del chat, señaló el oficial del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional de Santa Cruz de Tenerife.

Uno de los vídeos que más impactó a los agentes fue en el que aparecía una niña brasileña de apenas cinco años de edad, a la que se le introducían objetos vaginal y analmente, mientras la pequeña permanecía atada.

La investigación desarrollada por la Policía Nacional fue tan sólida que la estrategia de la abogada defensora y del acusado consistió en aceptar la autoría de los hechos.

En base a esa circunstancia, el fiscal Alejandro Salinas aceptó rebajar de ocho a cinco años el periodo de privación de libertad en la condena, así como bajar de doce a ocho años el tiempo en el que el ciudadano italiano no podrá realizar cualquier trabajo, remunerado o no, que implique su relación con menores de edad.

Al finalizar la vista, el acusado mostró su arrepentimiento por lo que hizo y aclaró que "lo siento mucho", ante los magistrados, el representante del Ministerio Público y su abogada.