Stepan Dolgikh ha sido condenado a 18 años de cárcel después de ser acusado de matar a su novia el mismo día de la boda, solo unas horas después de que intercambiaran sus votos. El hombre declaró ante el tribunal de Novosibirsk (Rusia) que creía que su nueva esposa le engañaba y la había acusado de "comportarse indebidamente" antes de matarla a golpes y después arrojar su cadáver por un barranco.

Dolgikh tenía una condena anterior por asesinato y de hecho conoció a la mujer durante su estancia en prisión. Varios testigos explicaron que empezó a golpearla después de ponerse "celoso" de una charla que ella estaba teniendo con otra invitada en la fiesta de boda que celebraron en una casa.

Los investigadores explicaron que los golpes y las patadas siguieron "fuera de la casa" pero que al poco tiempo volvieron a entrar y ahí el joven acabó con la vida de su ya esposa. Una vez muerta, acudió a un barranco y lanzó el cadáver. "La agarró por el pelo, la golpeó y la empujó a la calle, donde también siguió golpeando su cuerpo y su cabeza", explicó la Policía.

El incidente se produjo varias horas después de que la pareja intercambiara sus votos en su boda. Al parecer, otros invitados estaban demasiado asustados para intervenir, pero llamaron a las fuerzas del orden para que intervinieran y el novio fue detenido en el lugar de los hechos por la Guardia Nacional rusa.