Aragón

El descuartizador de Ricla (Zaragoza) sale a la calle en su primer permiso

Antonio Losilla fue condenado a 15 años y el paradero de la víctima se desconoce

Antonio Losilla, cuando fue detenido durante su detención en 2012. A la izda. su esposa y víctima, Pilar Cebrián.

Antonio Losilla, cuando fue detenido durante su detención en 2012. A la izda. su esposa y víctima, Pilar Cebrián.

L. M. G.

Ya han pasado diez años del asesinato y posterior descuartizamiento de Pilar Cebrián, de 52 años, y todavía sigue siendo una incógnita dónde están sus restos. Quien fuera condenado por su muerte, su esposo Antonio Losilla, fue condenado a 15 años de prisión y ya ha podido disfrutar de su primer permiso carcelario.

Losilla disfrutó de tres días de libertad y regresó al centro penitenciario de Zuera, en Zaragoza, donde cumple condena desde el día de su arresto. El reo había pedido en varias ocasiones poder salir a la calle, si bien en todas fue rechazada por los informes realizados por la Junta Penitenciario del centro. Sin embargo, en esta última ocasión, el juez de Vigilancia Penitenciara le concedió la solicitud realizada por su abogado Juan Manuel Martín Calvente. Una concesión que, si todo transcurre dentro de la normalidad, podría conllevar un tercer grado en verano.

El nombre de Pilar Cebrián está ligado desde el inicio a la desaparición, incluso se incluyó en los listados de Interpol. Así se trató el caso tras la denuncia que realizó el propio Losilla ante la Policía Nacional. Fue 22 días después de la muerte violenta. Un tiempo que invirtió en deshacerse del cadáver y también en montarse una coartada. De hecho, Losilla se llegó a jactar de que "sin cuerpo no había delito" y se mofó de José Bretón, responsable de asesinar a sus hijos en Córdoba, por dejar los huesos en una finca familiar, en 2011. Pero Losilla cometió errores. Hasta 79 indicios inculpatorios, llegó a enumerar el Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Aragón.

La entrada y registro en la vivienda, escena del crimen, en Ricla, marcó un antes y un después. Allí, mientras la Policía Nacional miraba hasta las tuberías, Losilla confesó el crimen: "Yo le fui a quitar la joya que llevaba en la mano, con una mano se la quité y con la otra le empujé, y se cayó y se dio con la manilla", recordó, mientras recalcó que "tenía sangre en la nariz, pero muy poca, y en la oreja". Sobre cómo se deshizo del cadáver también dio detalles: "Como era delgada, no tuve problemas y sin arrastrar la traje hasta aquí (la bodega de la vivienda), esperé un poco más y empecé a diseccionarla. Hice paquetes pequeños para que no levantara sospecha y las partes internas, como tiene tanto parecido con la de cualquier animal, las eché por aquí, por el pueblo".

Confesión que luego negó

Una declaración grabada en vídeo que fue estudiada por la Unidad de Inteligencia Criminal del Cuerpo Nacional de Policía, que destacó que Antonio Losilla “trivializó el momento que estaba viviendo y que intentó dar credibilidad a su relato”. Resaltaron su posición de “distanciamiento de los hechos”. Luego, en el juicio, negó dicha confesión y dijo que había recibido presiones.

Losilla lo planificó todo. Como elementos preparatorios destaca la compra de un desatascador químico y tres botes de espuma de poliuretano que, según éste, eran para reparar el tejado y para desatascar el baño ya que a su hija se le cae mucho el pelo, pero posteriormente se averiguó que hizo una limpieza exhaustiva del garaje, empleando dicho producto en el desagüe. El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional entendió que fue ahí donde Losilla descuartizó a su esposa y donde después la Policía Científica halló sangre en las tuberías que coincidía con el perfil genético de Pilar Cebrián.

Tras matarla, Losilla se dedicó a ligar: "Quiero quedar con una chica de 45-55 años", escribió en la red de contactos Badoo. Las psicólogas del Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA) estudiaron los correos y conversaciones del acusado, definiendo a Losilla como una persona "narcisista", "dominante" y con "rasgos psicopáticos".

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