Investigación

Unos ladrones de un bar de Castelló piden pizzas durante su robo

Tras comer en la cafetería, los ladrones se marcharon del local, dejando la prueba de las cajas de pizza y los aperitivos

Imágenes de los daños causados en bares de Castelló y una tienda de móviles de Vila-real.

Imágenes de los daños causados en bares de Castelló y una tienda de móviles de Vila-real.

La Policía Nacional investiga, al menos, dos robos en establecimientos de hostería de Castellón y también en una tienda de móviles de Vila-real en las últimas horas. En todos los casos los ladrones reventaron las puertas de cristal o escaparates para hacerse con el botín, por lo que no parece descabellado que los casos estuvieran relacionados.

El primero de ellos se produjo, como ya avanzó ayer Mediterráneo en su edición digital, en la cafetería Bogart de la avenida Camp de Morvedre de Castelló. El establecimiento fue asaltado en la madrugada del miércoles y los ladrones fracturaron la puerta de cristal de la entrada con una tapa de alcantarilla para poder acceder al local. Según pudo saber este periódico, el aviso se recibió sobre las 6.30 horas y los asaltantes se llevaron la caja registradora, en la que sí había dinero pese a ser de noche. Sin embargo, no forzaron otras máquinas del bar. «Nos han hecho una maleza», explicaron los trabajadores del bar ayer en conversaciones con este diario. 

Cabe recordar que, precisamente, una tapa de alcantarilla era el elemento utilizado por un ladrón que en el 2020 reventó numerosos escaparates de tiendas de telefonía y puso en jaque a la policía (sin relación aparente con este caso más alla del elemento utilizado en los robos con fuerza).

En la avenida Almassora de la capital de la Plana los amantes de lo ajeno también reventaron en la madrugada de ayer la entrada a la cafetería Tribeca --ubica dentro del actual gimasio OKPadel y antiguamente conocido como Suministros Valls--. Los asaltantes provocaron un gran destrozo en el interior y se llevaron dos máquinas registradoras. Parece ser que los autores se tomaron el robo con calma, pues llegaron incluso a meterse en las cocinas del restaurante y decidieron cenar allí. De hecho, pidieron pizzas y unas patatas y se las comieron en el mismo establecimiento, desafiando a al salto de la alarma y también a la posible llamada de algún vecino que alertara a la policía.

Tras comer en la cafetería, los cacos se marcharon del local, dejando la prueba de las cajas de pizza y los aperitivos. Ahora, cabrá comprobar por parte de los investigadores si el pedido de la cena dejó algún rastro, bien sea telefónico, bancario o de otro tipo.

"Cuando hemos llegado por la mañana, estaba todo absolutamente revuelto. Todo tirado por el suelo", explicaban ayer las trabajadoras, que tuvieron que emplearse a fondo para limpiar el estropicio y poder abrir al público tras el robo. La puerta fracturada quedó precintada y señalizada, a la espera de que sea reparada.

Una tienda móvil en Vila-real

En Vila-real, concretamente en la empresa geSuncer de la avenida Francisco Tárrega, también se cometió otro robo en la noche del miércoles al jueves.

Al parecer, los ladrones emplearon un vehículo todoterreno para romper el cristal del escaparate con el método del alunizaje y llevarse, así, todos los teléfonos móviles iPhone del expositor del negocio. Los asaltantes se quedaron en la zona de acceso, sin llegar a entrar al almacén y la del símbolo de la manzana mordida fue la única marca que se llevaron, por lo que el botín deseado estaba muy claro. Tampoco cogieron ni ordenadores ni tabletas, según pudo saber este periódico.

Las pertinentes denuncias de todos los casos ya están interpuestas en la Policía Nacional.