VIOLENCIA MACHISTA

Amenaza a su expareja con un cuchillo y se atrinchera: "Sal, que te voy a matar"

La Policía detiene a un hombre en Torrejón de Ardoz (Madrid) que acudió armado a casa de sus padres, donde vive su expareja, de 25 años, de la que tiene orden de alejamiento

Se marchó luego a su vivienda y se encerró con dos compañeros de piso. Los agentes tuvieron que usar la pistola táser para reducirlo

La Policía Nacional logró poner a salvo tanto a la mujer como a los testigos.

La Policía Nacional logró poner a salvo tanto a la mujer como a los testigos. / POLICÍA NACIONAL

Agentes de la Policía Nacional han detenido a un hombre, de 27 años y nacionalidad rumana, en Torrejón de Ardoz (Madrid), por amenazar con un cuchillo a su expareja, de 25 años y peruana, y atrincherarse luego en su piso, junto a otras dos personas, según ha podido saber CASO ABIERTO, el canal de investigación y sucesos de Prensa Ibérica. Gracias a la pistola táser, los agentes pudieron reducirlo y poner a salvo a las víctimas.

El arrestado, que tiene una orden de alejamiento de la mujer por violencia de género después de que ella lo denunciara el pasado 24 de febrero, acudió este lunes, sobre las seis de la tarde, a casa de sus padres.

Logró evitar que entrara

Su expareja acababa de mudarse a vivir con sus exsuegros tras marcharse del piso donde ambos convivían. El hombre lo sabía y se presentó allí, armado y mostrándose muy agresivo, e intentó entrar por la fuerza, blandiendo un cuchillo en la mano y gritándole: "Sal, que te voy a matar".

La mujer, asustada, se protegió y encerró como pudo logrando evitar que el hombre accediera al domicilio, según declaró luego a la policía.

Autolesionarse

Tras no conseguir su objetivo, el presunto agresor se marchó a su casa, en la misma localidad madrileña, donde se encontraban sus dos compañeros de piso, y se encerró con ellos dentro, advirtiéndoles de que no quería salir de allí. Su propio padre acudió a la vivienda para tratar de calmarlo y mediar, pero el ahora detenido lo amenazó con que iba a autolesionarse.

De acuerdo con los testigos, el arrestado no llegó a agredir a su padre ni a los dos inquilinos del piso, que aguardaron en sus respectivas habitaciones a que llegara la policía, pero el presunto agresor sí que les impidió salir del piso. Tampoco abrió la puerta a los agentes cuando estos llegaron al domicilio, por lo que, ante la gravedad de los hechos, tuvieron que forzarla.

Pistola táser

Una vez que la Policía consiguió acceder, el hombre se encerró en el baño, donde los agentes también tuvieron que entrar por la fuerza. El detenido se enfrentó a ellos y ofreció una gran resistencia. Para arrestarlo, tuvieron que emplear la pistola táser para poder reducirlo y liberar a las tres personas.

Se le imputan delitos de malos tratos, quebrantamiento de condena, detención ilegal y resistencia y desobediencia a la autoridad.

El teléfono 016 atiende a las víctimas de toda la violencia machista —de la física a la psicológica, la sexual o la trata—, a sus familias y a su entorno, las 24 horas del día, todos los días del año.