Una intervención conjunta de Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria y Policía Nacional permitió en la mañana de ayer, domingo, reducir a un hombre que había amenazado con una catana a su mujer y a su madre en el barrio de Siete Palmas. El detenido por violencia de género y doméstica fue ingresado en psiquiatría del Hospital Doctor Negrín debido a que presenta problemas de salud mental.

El suceso se produjo en un edificio de la avenida Pintor Felo Monzón, a la altura del Parque Juan Pablo II, cuando los cuerpos de seguridad fueron requeridos por la presencia de una persona en actitud violenta en el interior de su domicilio. Según las fuentes consultadas, la madre del ahora detenido pudo salir de la vivienda, pero dentro permanecía la pareja sentimental.

Un agente de la Policía Local provisto de un taser -arma semejante a una pistola que emite cargas eléctricas para incapacitar a una persona-, con el apoyo de compañeros de la Policía Nacional que portaban escudos de autoprotección, entraron en el piso y se encontraron con el hombre tirado en una cama. En un primer momento trataron de tranquilizarlo, pero se levantó y amenazó a los policías, que utilizaron el taser para reducirlo, según precisaron las mismas fuentes.

El hombre, de unos dos metros de altura y más de 120 kilos de peso, fue llevado hasta el vehículo policial por hasta seis agentes debido a que opuso fuerza al pasarse los efectos del electrochoque. Así, los cuerpos de seguridad decidieron derivarlo a la unidad de psiquiatría del citado hospital grancanario, al tratarse de un paciente con un trastorno mental, donde se encuentra ingresado y detenido como presunto autor de los delitos de violencia de género y violencia doméstica.

La intervención se produjo en apenas ocho minutos y en la misma no hubo heridos, como reseñaron las fuentes. Los agentes se incautaron de la catana, que tenía una hoja de más de 20 centímetros de longitud.